Puntos Clave
• El Vuelo LH405 regresó a JFK tras fallo de motor y problemas hidráulicos el 12 de mayo de 2025.
• Lufthansa mantiene antiguos A340-300 por retrasos en la entrega de aviones nuevos hasta al menos 2028.
• Emergencias como LH405 afectan migración, reuniones urgentes y movilidad internacional de los viajeros.
Un vuelo de Lufthansa que cubría la ruta de Nueva York a Frankfurt el 12 de mayo de 2025 vivió momentos difíciles después de que uno de sus motores fallara en pleno vuelo. El avión involucrado, un Airbus A340-300 con 27 años de antigüedad y matrícula D-AIGN, tuvo que regresar al aeropuerto John F. Kennedy (JFK) tras presentar una serie de problemas técnicos que pusieron a prueba tanto a los pilotos como a la tripulación y los pasajeros.
Lo que ocurrió en el vuelo LH405

El vuelo LH405 de Lufthansa despegó del aeropuerto JFK rumbo a Frankfurt sin señales de problemas al inicio. Poco después, mientras el avión volaba a 35,000 pies (unos 10,700 metros), aproximadamente a 120 millas al sureste de Boston, los pilotos notaron una falla en el motor número 2. Esta situación, conocida como fallo de motor, puede complicar mucho la seguridad y el manejo de cualquier vuelo, más aún cuando ocurre sobre el Atlántico en una aeronave grande y antigua.
Ante esta emergencia, la tripulación activó una alerta llamada PAN-PAN, que en la jerga de aviación indica que hay una situación urgente que requiere ayuda, pero que no representa un peligro inmediato de perder vidas. Esto permite a los controladores aéreos dar prioridad al avión e iniciar protocolos de asistencia, sin llegar al nivel de máxima alerta.
Después del fallo de motor, los pilotos solicitaron descender a 29,000 pies para mantener el control del avión y disminuir los riesgos. Durante unos 17 minutos, la tripulación evaluó si sería posible continuar el viaje trasatlántico hacia Alemania o si era más seguro regresar. Finalmente, el capitán decidió volver a Nueva York, optando por la seguridad de los pasajeros y la tripulación antes que arriesgarse a cruzar el océano con un motor menos.
El regreso y el problema hidráulico
El regreso al aeropuerto JFK no fue sencillo. Antes de pensar en aterrizar, el Airbus A340-300 tuvo que realizar un procedimiento conocido como “dumping” o vaciado de combustible. Esto se hace porque los aviones suelen despegar más pesados que el peso permitido para aterrizar, y aterrizar con sobrepeso puede dañar tanto el avión como la pista y representar un riesgo extra en caso de emergencia. Así, el LH405 sobrevoló áreas designadas donde es seguro liberar combustible, con el permiso y guía de los controladores.
Cuando ya estaba cerca del aeropuerto, surgió otro problema: falló parte del sistema hidráulico del avión. El sistema hidráulico es esencial, pues ayuda a controlar muchos movimientos y funciones básicas como los frenos, el tren de aterrizaje y las superficies de control del avión. Debido a esto, el primer intento de aterrizaje tuvo que suspenderse y los pilotos pidieron realizar maniobras adicionales en el aire para solucionar el desperfecto antes de intentar de nuevo bajar a tierra.
Después de trabajar en el problema desde la cabina, los pilotos lograron estabilizar el sistema hidráulico y prepararse para un segundo intento de aterrizaje. Finalmente, el LH405 aterrizó sin incidentes graves en la pista 31L del aeropuerto JFK. Las medidas de seguridad y el profesionalismo del equipo lograron que todos llegaran en buen estado, y nadie resultó herido.
¿Qué pasó con el avión después del incidente?
Tras el aterrizaje, el avión quedó en tierra en el aeropuerto JFK para una revisión a fondo por parte de los técnicos de Lufthansa. A fecha del 14 de mayo de 2025, el A340 todavía seguía en Nueva York, sin permiso para volver a volar hasta que los expertos determinaran el origen exacto de los problemas y realizaran las reparaciones necesarias.
Este tipo de incidentes no solo detienen el avión, sino que obligan a la aerolínea a revisar los protocolos de mantenimiento y seguridad. Además, pone en evidencia los desafíos de operar aviones con muchos años de servicio, algo que también preocupa a los reguladores y agencias de aviación.
¿Por qué Lufthansa sigue usando el A340 de más de 25 años?
Aunque muchas líneas aéreas ya han dejado de emplear aviones como el Airbus A340, Lufthansa todavía opera una de las flotas más grandes de este modelo en el mundo, con alrededor de 25 aviones en servicio. El A340 es un avión de largo alcance y cuatro motores, confiable durante muchos años, pero según la investigación de VisaVerge.com, el modelo está cerca del final de su vida útil en Lufthansa.
La razón por la cual Lufthansa sigue usando el A340 se debe a varios factores. Por un lado, renovar una flota de largo alcance requiere inversiones muy altas y depende de la disponibilidad de aviones nuevos de fabricantes como Airbus y Boeing. Por otro lado, la empresa ha encargado aviones modernos para reemplazar a los A340, pero estos aún no han llegado completamente debido a retrasos en la producción y problemas en la cadena de suministro.
Lufthansa ha anunciado que retirará todos sus A340 para el año 2028. Los modernos Airbus A350-900 y Boeing 787 reemplazarán principalmente a los A340-300, como el del incidente de Nueva York, mientras que los A340-600 serán reemplazados por los nuevos A350-1000. Sin embargo, el fabricante Boeing ha experimentado demoras en la entrega del 787 Dreamliner, problemas de certificación y también retrasos en la entrada en servicio del 777-9, que ahora se espera para 2026.
Estos retrasos han forzado a Lufthansa a mantener sus viejos A340 en operación más tiempo de lo planeado, lo cual aumenta la probabilidad de incidentes técnicos relacionados con la edad de los aviones.
¿Por qué es importante el fallo de motor en vuelos largos?
El fallo de motor como el ocurrido en el vuelo LH405 es uno de los escenarios más temidos por la tripulación en vuelos intercontinentales. Aunque el A340 tiene cuatro motores y puede continuar volando con uno menos, las regulaciones y prácticas de seguridad recomiendan regresar o aterrizar pronto cuando ocurre un fallo de motor, especialmente si se está sobre el océano o lejos de aeropuertos principales.
Un motor menos significa menos capacidad de respuesta ante otros posibles problemas y reduce los márgenes de seguridad. Los aviones modernos son cada vez más confiables, pero la fatiga de materiales, la antigüedad de los componentes y el uso intensivo pueden aumentar los riesgos de incidentes.
Por este motivo, cuando volamos en aviones de más de 25 años y ocurre un fallo de motor, las tripulaciones siguen procedimientos muy estrictos y suelen elegir la opción más segura, aunque implique molestias para los pasajeros como largas demoras, desvíos o la cancelación definitiva del viaje.
¿Cómo afecta esto a los pasajeros y a la industria?
Situaciones como la del Vuelo LH405 pueden ser angustiantes para los pasajeros, pues un regreso forzado y problemas técnicos en pleno vuelo generan preocupación y pueden afectar la confianza en la compañía aérea. Para el personal de vuelo, estos incidentes son entrenados y estudiados en simuladores, pero requieren calma y precisión para evitar consecuencias.
A nivel industria, los incidentes de este tipo presionan a las compañías a acelerar la renovación de sus flotas y a los fabricantes a entregar aviones nuevos en el menor tiempo posible. Además, obligan a las autoridades de aviación civil a revisar las normas de mantenimiento y seguridad para aviones mayores de 20 años.
Los eventos de este tipo también pueden cambiar las reglas para futuros vuelos. Por ejemplo, podría haber nuevas recomendaciones de revisión para piezas clave en aviones antiguos o cambios en la cantidad de años que un avión puede seguir volando en rutas intercontinentales.
¿Qué debe saber el pasajero si esto ocurre en su vuelo?
Si bien incidentes como el del Vuelo LH405 son poco frecuentes, siempre es bueno estar informado sobre lo que sucede a bordo. Cuando ocurre un estado PAN-PAN, es diferente a MAYDAY (la máxima alerta). Esto significa que la situación es seria pero no amenaza directamente la vida de las personas, aunque probablemente habrá cambios en el itinerario, demoras o aterrizajes imprevistos.
Las aerolíneas están obligadas a informar a los pasajeros sobre el estado de su vuelo, reacomodar a los afectados y ofrecer opciones para llegar a su destino lo antes posible. Además, muchos países tienen normativas claras sobre compensaciones y derechos de los pasajeros en casos de cancelación o largos retrasos.
Quienes deseen saber más sobre sus derechos como pasajeros afectados por incidentes de seguridad y desviaciones obligadas pueden consultar las páginas oficiales de la autoridad de aviación civil de su país. Para conocer las regulaciones de la Unión Europea sobre derechos de pasajeros aéreos, puede visitar la página oficial de la UE sobre Derechos de los Pasajeros Aéreos.
¿El reemplazo de los A340 resolverá estos problemas?
El plan de Lufthansa para renovar su flota con modelos más nuevos como el A350 y el 787 promete reducir el riesgo de problemas técnicos vinculados a la edad del avión, como el fallo de motor experimentado por el Vuelo LH405. Los aviones más modernos no solo consumen menos combustible, sino que integran tecnología más avanzada para predecir y evitar fallos antes de que pongan en peligro el vuelo.
Sin embargo, como VisaVerge.com indica, la transición no es instantánea. Hasta que todos los aviones viejos sean reemplazados y los nuevos estén 100% operativos y certificados, los operadores como Lufthansa deben trabajar en fortalecer sus programas de mantenimiento, evaluar con más frecuencia el estado de partes críticas y actualizar sus protocolos de capacitación para la tripulación.
¿Qué lecciones deja el caso del Vuelo LH405?
- La experiencia y preparación del equipo a bordo pueden marcar la diferencia, incluso en aviones antiguos, cuando ocurre un incidente.
- El fallo de motor en vuelos largos requiere decisiones rápidas y seguras; volver suele ser la mejor opción.
- La edad de las aeronaves es un factor de riesgo, aunque el buen mantenimiento y las inspecciones pueden reducirlo.
- El avance hacia nuevas flotas, aunque lento, mejora la seguridad y eficiencia a largo plazo para las aerolíneas y sus pasajeros.
En resumen, aunque volar es una de las formas más seguras de viajar, incidentes como el vivido por el Vuelo LH405 de Lufthansa recuerdan la importancia de la seguridad, el mantenimiento estricto y la necesidad de modernizar las flotas. Para quienes dependen de vuelos internacionales, estar atentos a las recomendaciones de autoridades de aviación y conocer sus derechos como pasajeros es clave para viajar con tranquilidad en el futuro.
Aprende Hoy
PAN-PAN → Alerta aeronáutica que indica una urgencia, no amenaza inmediata de vida, y permite asistencia especial de los controladores.
Vaciado de combustible → Procedimiento de liberar combustible en vuelo para reducir el peso antes de un aterrizaje de emergencia.
Sistema hidráulico → Mecanismo del avión que utiliza fluidos para controlar frenos, tren de aterrizaje y superficies de mando.
Renovación de flota → Sustitución de aviones antiguos por modelos más modernos, seguros y eficientes para optimizar operaciones.
Retrasos de certificación → Demoras en la aprobación oficial de nuevos aviones, postergando su entrega y entrada en servicio.
Este Artículo en Resumen
El Vuelo LH405 de Lufthansa, operando un Airbus A340-300 de 27 años, tuvo que regresar a JFK por fallo de motor y problemas hidráulicos. Gracias al profesionalismo de la tripulación, no hubo heridos. Esto resalta los retos de operar aviones antiguos y la importancia de renovar flotas para seguridad aérea.
— Por VisaVerge.com
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