Puntos Clave
- Los dos albergues principales de migrantes en San Diego cerraron en marzo de 2025 por políticas federales restrictivas.
- Recortes federales redujeron recursos; organizaciones basadas en la fe ofrecen apoyo legal y humanitario.
- Más de 100,000 migrantes liberados; la mayoría avanza rápido, pero muchos enfrentan riesgo de indigencia.
Desde el 5 de agosto de 2025, el panorama para los solicitantes de asilo en San Diego ha cambiado drásticamente. La llegada de migrantes ha disminuido notablemente debido a las políticas migratorias implementadas por la administración Trump, lo que ha provocado el cierre de los dos albergues más grandes de la ciudad. Sin embargo, nuevas iniciativas basadas en la fe y la comunidad han surgido para apoyar a quienes aún enfrentan un sistema de asilo complejo y desafiante.

Cambios Recientes en San Diego para Solicitantes de Asilo
En marzo de 2025, los dos principales albergues para migrantes en San Diego, Catholic Charities y Jewish Family Service (JFS), cerraron sus puertas. Estas organizaciones atendieron a más de 250,000 personas en años recientes, pero ahora solo reciben a unos pocos migrantes cada semana. La razón principal de esta reducción es la fuerte caída en la llegada de solicitantes de asilo, causada por las nuevas políticas federales de inmigración bajo la administración Trump. Aunque los cierres no se consideran definitivos, reflejan un cambio importante en la capacidad local para alojar a migrantes[2].
A pesar del cierre de los albergues, estas organizaciones han redirigido sus esfuerzos hacia la prestación de servicios legales gratuitos, especialmente para grupos vulnerables como menores no acompañados y adultos en riesgo de deportación. Jewish Family Service continúa ofreciendo asesoría legal en 12 universidades y colegios locales, además de apoyo para renovaciones de DACA, asistencia alimentaria, cuidado para personas mayores y gestión de casos para inmigrantes y residentes indocumentados[2].
Impacto de los Recortes Federales y Cambios en la Demanda
Los recortes en la financiación federal para servicios a migrantes han limitado aún más la capacidad de las organizaciones locales para ofrecer ayuda directa, como alojamiento y comida. Esto ha obligado a que muchas dependan más de donaciones y apoyo comunitario para mantener sus programas[2].
En 2024, San Diego fue el sector fronterizo más activo, con más de 37,000 detenciones solo en abril, un aumento cercano al 50% respecto al año anterior. Sin embargo, para principios de 2025, las llegadas disminuyeron drásticamente debido a las políticas restrictivas implementadas por la administración Trump[1][2].
Situación Actual de los Migrantes en San Diego
Durante el último año, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) liberó a más de 100,000 migrantes en San Diego. Más del 95% de ellos permanecieron solo unos días antes de continuar hacia otros destinos dentro de Estados Unidos 🇺🇸. Sin embargo, aquellos que no pudieron seguir su camino enfrentan la realidad de la falta de vivienda. Desde septiembre de 2024, más de 1,100 migrantes han buscado refugio en el Centro de Respuesta para Personas sin Hogar de la ciudad[3].
El sistema de asilo también enfrenta un retraso enorme. Al 31 de diciembre de 2024, había 1,446,908 solicitudes de asilo pendientes en el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS), y más de 3.7 millones de casos abiertos en tribunales de inmigración en todo el país. Los solicitantes que recibieron asilo en el año fiscal 2024 esperaron un promedio de 1,283 días para obtener una decisión[4][7].
Respuesta Local y Nuevos Modelos de Apoyo
La supervisora del condado, Nora Vargas, destacó que se han utilizado casi 20 millones de dólares en fondos federales para crear un “Centro de Día para la Transición de Migrantes”. Este centro ofrece comida, ropa e información para ayudar a los solicitantes de asilo a conectarse con patrocinadores o continuar su viaje hacia otros lugares en Estados Unidos 🇺🇸. Sin embargo, el impacto a largo plazo para los migrantes sin hogar que permanecen en San Diego sigue siendo incierto[3].
Con el cierre de los albergues tradicionales, las organizaciones basadas en la fe y la comunidad han tomado un papel más importante para llenar los vacíos en los servicios. Aunque no se ha identificado un programa específico llamado “FAITH”, la participación continua de iglesias y grupos religiosos en la ayuda humanitaria, asesoría legal y apoyo emocional sigue siendo fundamental en la región[2][3].
PATH San Diego es otra organización que continúa ofreciendo servicios y vivienda para migrantes sin hogar, señalando una crisis creciente entre quienes no pueden abandonar la ciudad[3].
Efectos de las Políticas Federales y Desafíos para los Migrantes
Las políticas restrictivas de la administración Trump han reducido el número de nuevos solicitantes de asilo en San Diego, pero también han aumentado la incertidumbre y el miedo entre los residentes indocumentados y quienes tienen casos pendientes. Solo las poblaciones más vulnerables —mujeres embarazadas, familias con niños, personas mayores, personas con necesidades médicas y miembros de la comunidad LGBTQ+— reciben prioridad para el espacio limitado en los albergues. El resto queda en las calles, enfrentando un alto riesgo de quedarse sin hogar[1][3].
Además, el retraso en los procesos legales mantiene a muchos en una situación de espera prolongada, con audiencias y decisiones que pueden tardar años. Esto genera estrés y dificulta la integración de los migrantes en la comunidad[4][7].
Procedimientos y Apoyos Disponibles
El Centro de Día para la Transición de Migrantes ofrece ayuda a corto plazo, como comida, ropa e información para que los migrantes puedan encontrar patrocinadores o viajar a otros destinos. Además, organizaciones como Jewish Family Service brindan asesoría legal gratuita, representación en casos vulnerables y educación en universidades locales[2][3].
El Centro de Respuesta para Personas sin Hogar funciona como un punto central para conectar a migrantes sin vivienda con los servicios disponibles, aunque su capacidad es limitada frente a la demanda creciente[3].
Perspectivas de Expertos y Voces de la Comunidad
Los defensores de los migrantes critican la falta de un plan a largo plazo para quienes son liberados en las calles, advirtiendo que sin un apoyo más sólido, muchos caerán en la indigencia crónica[3]. Por su parte, funcionarios locales insisten en la necesidad de más apoyo federal y estatal, así como en la importancia de alianzas innovadoras con organizaciones basadas en la fe y la comunidad para atender las necesidades humanitarias[3][5].
Expertos legales señalan que, aunque las deportaciones pueden aumentar, los derechos al debido proceso se mantienen. Sin embargo, el retraso en los tribunales probablemente empeorará bajo las políticas actuales[7].
Contexto Histórico y Desafíos Locales
San Diego ha sido durante mucho tiempo un punto clave para la entrada de solicitantes de asilo y refugiados, con una red diversa de proveedores de servicios y una tradición de apoyo basado en la fe. Sin embargo, el alto costo de vida y la falta de vivienda asequible complican la situación tanto para los recién llegados como para las organizaciones que los apoyan[1][5].
Perspectivas Futuras y Cambios Pendientes
Las agencias han declarado que están listas para reabrir los albergues si las llegadas aumentan o si cambios en las políticas generan nuevas necesidades. La situación sigue siendo incierta y dependerá de las decisiones federales, las resoluciones judiciales y los debates políticos en curso sobre la aplicación de la ley migratoria y la ayuda humanitaria[7].
Se espera que las organizaciones comunitarias y basadas en la fe jueguen un papel aún más importante, dado que los recursos gubernamentales permanecen limitados y las políticas pueden cambiar rápidamente[2][3].
Recursos Oficiales para Solicitantes de Asilo en San Diego
- Jewish Family Service of San Diego: https://www.jfssd.org/
- Catholic Charities Diocese of San Diego: https://ccdsd.org/
- PATH San Diego: https://www.epath.org/regions/san-diego/
- Oficina de Inmigración y Asuntos de Refugiados del Condado de San Diego: https://www.sandiegocounty.gov/content/sdc/hhsa/programs/ssp/oira.html
Para quienes necesitan ayuda inmediata, estas organizaciones y el Centro de Día para la Transición de Migrantes son puntos de contacto clave para recibir apoyo legal, humanitario y de integración.
Información Adicional sobre Formularios de Inmigración
Los solicitantes de asilo deben presentar el formulario I-589, Solicitud de Asilo y Suspensión de Remoción, que se puede encontrar en la página oficial del Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS) aquí: https://www.uscis.gov/i-589. Este formulario es esencial para iniciar el proceso de asilo y debe completarse con cuidado para evitar retrasos.
Conclusión: Un Sistema en Transformación con Desafíos Persistentes
La situación de los solicitantes de asilo en San Diego refleja un sistema en constante cambio, marcado por políticas federales restrictivas, cierres de albergues y una creciente dependencia de organizaciones basadas en la fe y la comunidad. Aunque la llegada de migrantes ha disminuido, las necesidades de quienes permanecen son urgentes y complejas.
La administración Trump ha reducido significativamente las llegadas y ha endurecido las políticas migratorias, afectando directamente a los solicitantes de asilo y a las organizaciones que los apoyan. Sin embargo, la comunidad local ha respondido con nuevas formas de ayuda, como el Centro de Día para la Transición y el fortalecimiento de servicios legales gratuitos.
Para los solicitantes de asilo, es vital conocer sus derechos y las opciones disponibles, incluyendo el acceso a asesoría legal y apoyo humanitario. La colaboración entre agencias gubernamentales, organizaciones sin fines de lucro y grupos religiosos será clave para enfrentar los desafíos actuales y futuros.
Según análisis de VisaVerge.com, la evolución de la política migratoria y la respuesta comunitaria en San Diego ofrecen un ejemplo claro de cómo las decisiones federales impactan directamente en la vida de miles de personas que buscan protección y una nueva oportunidad en Estados Unidos 🇺🇸.
Este escenario exige atención continua, recursos adecuados y soluciones creativas para garantizar que los solicitantes de asilo reciban el apoyo necesario mientras esperan la resolución de sus casos en un sistema que aún enfrenta grandes retrasos y limitaciones.
Aprende Hoy
Solicitante de asilo → Persona que busca protección legal en EE.UU. debido a persecución o temor en su país de origen.
USCIS → Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos, agencia que procesa solicitudes de asilo y beneficios migratorios.
Centro de Respuesta para Personas sin Hogar → Centro local en San Diego que ofrece ayuda y refugio limitado a migrantes sin vivienda.
Centro de Día para la Transición de Migrantes → Lugar que brinda ayuda temporal como comida, ropa e información para migrantes en tránsito.
DACA → Acción Diferida para los Llegados en la Infancia, programa que protege a inmigrantes indocumentados elegibles.
Este Artículo en Resumen
En 2025, San Diego cerró sus principales albergues por políticas migratorias restrictivas. Grupos de fe ahora brindan ayuda legal y humanitaria. Muchos migrantes corren riesgo de indigencia mientras esperan decisiones de asilo en un sistema con grandes retrasos y limitados recursos.
— Por VisaVerge.com