Puntos Clave
- El NTSB inició audiencias el 30 de julio de 2025 sobre la colisión aérea fatal de enero.
- La investigación aborda entrenamiento, control aéreo y coordinación entre autoridades militares y civiles.
- Se hallaron fallas en altímetros, uso apagado de ADS-B Out y deficiencias en capacitación.
El 29 de enero de 2025, una colisión en el aire sobre Washington, D.C., entre un avión Bombardier CRJ700 de American Airlines y un helicóptero Black Hawk del Ejército de los Estados Unidos causó la muerte de las 67 personas a bordo. Actualmente, el National Transportation Safety Board (NTSB) investiga este accidente, enfocándose en los procedimientos de entrenamiento de vuelo, el control del tráfico aéreo y la coordinación entre agencias para entender las causas y evitar futuros incidentes.

Las audiencias del NTSB comenzaron el 30 de julio de 2025 y durarán tres días. En ellas, funcionarios de la FAA, representantes del Ejército, controladores aéreos y expertos técnicos ofrecen testimonios. Se presentaron videos de vigilancia y una animación de 11 minutos que reconstruye la secuencia del accidente, mostrando detalles inéditos sobre cómo ocurrió la colisión en el aire.
El NTSB cuestiona la calidad del entrenamiento de vuelo tanto para los pilotos del helicóptero Black Hawk como para los controladores aéreos en el Aeropuerto Nacional Ronald Reagan (DCA). También examina la efectividad de los protocolos para manejar un espacio aéreo con mucho tráfico y uso mixto, donde operan aviones civiles y militares.
Entre los hallazgos clave, se reveló que los pilotos del Black Hawk podrían no haber tenido conciencia precisa de su altitud y proximidad al avión debido a posibles fallas en los altímetros del helicóptero. Además, la grabadora de voz de la cabina del CRJ700 registró una alerta del sistema TCAS (Sistema de Alerta y Prevención de Colisiones) unos 20 segundos antes del impacto, pero no se emitió una recomendación clara para evitar la colisión. Los pilotos intentaron maniobras evasivas solo segundos antes del choque.
Clark Allen, exgerente de operaciones de la torre de control en DCA, declaró que aunque los controladores están entrenados para pedir ayuda si se sienten abrumados, no existe una capacitación proactiva para supervisores que detecten problemas de carga de trabajo. También se reconoció que la alta rotación de controladores en DCA afecta la seguridad y la consistencia del entrenamiento.
El NTSB destacó que los helicópteros del Ejército suelen volar cerca del aeropuerto con el equipo ADS-B Out apagado, lo que reduce su visibilidad para controladores y otras aeronaves. Esto representa un riesgo importante en un espacio aéreo tan congestionado.
Las recomendaciones urgentes del NTSB incluyen mejorar los procedimientos de entrenamiento de vuelo, exigir el uso obligatorio del ADS-B Out y fortalecer la comunicación entre autoridades militares y civiles. La FAA enfrenta críticas por no haber abordado adecuadamente los 85 incidentes de casi colisión registrados en DCA antes del accidente fatal.
La presidenta del NTSB, Jennifer Homendy, lidera las audiencias con el compromiso de encontrar las causas raíz y evitar tragedias futuras. Nick Fuller, subdirector operativo interino de la FAA, afirmó que aunque los pilotos deben mantener la separación visual, los controladores deben proporcionar información adicional cuando sea necesario.
Familiares de las víctimas participan en las audiencias, buscando respuestas y responsabilidad. La investigación incluye el análisis de registros de vuelo, grabadoras de voz y datos, y piezas principales de los restos de ambas aeronaves. Se espera que el informe final del NTSB, previsto para finales de 2025, impulse cambios en los protocolos de entrenamiento y gestión del espacio aéreo.
Este accidente es el más mortal en la aviación estadounidense desde 2001 y ha aumentado la preocupación sobre la seguridad en espacios aéreos compartidos entre fuerzas militares y vuelos civiles. Se anticipan audiencias en el Congreso y posibles reformas legislativas para mejorar la seguridad aérea, la dotación de personal en control de tráfico y la coordinación interinstitucional.
Para más información oficial sobre seguridad aérea y procedimientos, se puede consultar la página del NTSB en ntsb.gov.
Según análisis de VisaVerge.com, la revisión de los procedimientos de entrenamiento de vuelo y la mejora en la supervisión del control aéreo son pasos esenciales para prevenir futuras colisiones en el aire. La implementación rápida de estas recomendaciones podría salvar vidas y restaurar la confianza en la seguridad aérea en zonas de alto tráfico.
Aprende Hoy
NTSB → Agencia estadounidense que investiga accidentes de transporte y recomienda mejoras de seguridad.
Colisión en el aire → Accidente donde dos aeronaves chocan mientras vuelan en el espacio aéreo.
Altímetro → Dispositivo que mide la altitud del avión sobre el nivel del mar para navegación segura.
ADS-B Out → Sistema automático que transmite la posición del avión a controladores y pilotos para evitar choques.
Sistema de Alerta y Prevención de Colisiones (TCAS) → Sistema a bordo que avisa a pilotos sobre aeronaves cercanas para evitar colisiones.
Este Artículo en Resumen
El NTSB investiga la colisión aérea mortal de enero en Washington, D.C., enfocándose en entrenamiento y seguridad aérea. Nuevas pruebas revelan errores en altímetros y fallas en coordinación, impulsando recomendaciones urgentes para evitar futuros accidentes en espacios aéreos compartidos.
— Por VisaVerge.com