Puntos Clave
- El padre Guillermo Treviño, 39, murió el 31 de octubre de 2025 en Iowa City por complicaciones de diabetes no diagnosticada.
- Se enfermó en Roma durante el Encuentro Mundial de Movimientos Populares y regresó a EE. UU. el día antes de morir.
- Dirigía las parroquias St. Joseph y presidía Escucha Mi Voz Iowa, acompañando inmigrantes a audiencias federales en Cedar Rapids.
(IOWA CITY, IOWA) Father Guillermo Treviño, una figura emblemática del movimiento a favor de los derechos de los inmigrantes en Iowa City, murió a los 39 años en Iowa City el viernes 31 de octubre de 2025, después de regresar de un viaje a Roma para participar en el Encuentro Mundial de Movimientos Populares. La causa oficial de la muerte fueron complicaciones de diabetes no diagnosticada, que llevaron a una perforación estomacal, según confirmó su hermana, Mariela Treviño-Luna, quien estuvo con él en Europa. Su fallecimiento ha dejado un vacío en las comunidades de inmigrantes que él acompañó durante años, y las respuestas de líderes religiosos y activistas señalan cuánto impactó su labor en la vida cotidiana de muchas familias.

Treviño era sacerdote de la Diócesis de Davenport y dirigía las iglesias parroquiales de St. Joseph en Columbus Junction y West Liberty. También se desempeñaba como presidente de la junta y miembro fundador de Escucha Mi Voz Iowa, un grupo de defensa de los derechos de los inmigrantes. Su labor no se limitaba a la labor pastoral; durante años fue una voz destacada cuando las comunidades de inmigrantes enfrentaron periodos de mayor escrutinio y vigilancia por las fuerzas de seguridad y autoridades migratorias. La propia vida de Treviño, que nació de padres inmigrantes mexicanos, estaba marcada por una relación estrecha con las personas a las que servía y por una personalidad que muchos describen como poco convencional para un sacerdote: humor contagioso, cercanía y una dedicación visible a la justicia social. En la actualidad, sus actividades recientes incluyeron su participación en un panel en Georgetown University y su reconocimiento como líder de fe a nivel nacional en temas migratorios.
La muerte de Treviño ha generado un torrente de reacciones en Iowa y más allá. El obispo Dennis Walsh, de la Diócesis de Davenport, señaló:
“Words cannot adequately express the deep sense of loss we feel across the diocese. Father Guillermo lived his priesthood with a remarkable and authentic closeness to his people. His leadership and commitment to justice will be deeply missed.”
Las palabras de Walsh continuaron al agregar: “May his soul, and the souls of all the faithful departed, rest in peace.” Estas declaraciones fueron difundidas por la oficina diocesana y reflejan la magnitud de la pérdida para las parroquias que Treviño sirvió de cerca y para toda la comunidad católica de la región.
La figura de Treviño trascendía lo local. Fue un defensor incansable de los derechos de los inmigrantes durante periodos de endurecimiento de las políticas migratorias en Iowa, acompañando a inmigrantes a audiencias en tribunales federales en Cedar Rapids y liderando protestas cuando eran detenidos por ICE. Su voz, en numerosas entrevistas, llegó a describir casos de deportaciones como parte de su misión por la justicia y el debido proceso. En particular, Treviño era conocido como el padrino de Pedro Pascual, un graduado de West Liberty deportado a comienzos de 2025. Treviño lo llamó “a travesty” en declaraciones públicas y trabajó para que se escucharan las vías legales correspondientes, defendiendo la necesidad de un procedimiento justo para cada persona afectada.
Entre las facetas humanas que destacaban a Treviño estaba su relación con la comunidad y su forma de vida. Era hijo de inmigrantes mexicanos y cultivaba vínculos profundos con sus feligreses; se decía que su cercanía le permitía entender las luchas cotidianas de las familias que buscaban una vida mejor. Sus pasiones personales también contribuían a su imagen pública: era aficionado a la lucha libre profesional y, a veces, asistía a eventos en su vestimenta litúrgica, posando con luchadores. En una anécdota que circula entre comunidades y que refleja su personalidad, se comenta que en Londres habló con el luchador MJF, quien publicó un tuit en el que decía:
“Father Treviño, thank God you’re a priest, because if you weren’t, your sex life would be exactly the same.”
Aunque estas historias muestran un rasgo humano y singular de su carácter, no eclipsan el compromiso serio con la justicia social y la defensa de los derechos de los inmigrantes que definió su vida pública.
En términos de estructura institucional, Treviño ocupó roles clave dentro de Escucha Mi Voz Iowa, donde ejercía como presidente de la junta y como capellán, y su liderazgo fue considerado central para las iniciativas de apoyo a comunidades que se enfrentaban a políticas de inmigración más rígidas o a procesos judiciales complicados. Su labor fue reconocida también a nivel nacional cuando recibió, en 2022, el Cardinal Bernardin New Leadership Award de la USCCB (Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos) por su trabajo para abordar la pobreza y la injusticia. Este reconocimiento reforzó su perfil como pastor que buscaba traducir la fe en acción pública concreta, especialmente en la asistencia a familias que se veían afectadas por la vulnerabilidad de sus estatus migratorio.
El anuncio de su fallecimiento llega en un momento en que las comunidades inmigrantes en Iowa buscaban continuidad y consuelo tras ver cómo las políticas migratorias y las prácticas de implementación de la ley afectaban a familias enteras. En el ámbito nacional, Treviño había participado recientemente en una intervención pública y en foros académicos que buscaban dar voz a comunidades que muchas veces quedan fuera de los grandes debates migratorios. Su presencia en el mundo académico, especialmente en un panel en Georgetown University, subrayó su papel como líder de fe que conectaba las preocupaciones morales con las realidades políticas y legales que enfrentan los inmigrantes.
La ciudad de Iowa City y las parroquias de Columbus Junction y West Liberty, así como la red de Escucha Mi Voz Iowa, han sido parte de la red de apoyo que Treviño tejió con una combinación de liderazgo espiritual y activismo cívico. Su muerte ha desatado un estado de luto en la congregación y en las comunidades de inmigrantes que mira con preocupación hacia el futuro sin su guía. Del mismo modo, se han expresado mensajes de solidaridad y reconocimiento en nombre de la Iglesia local, que destacaron la persona de Treviño como una figura que
“vivió su sacerdocio con una cercanía auténtica a su gente”
y que su liderazgo
“será profundamente extrañado”.
El periodo de duelo y las reparaciones emocionales que se avecinan para la comunidad se cruzan con la necesidad de continuar el legado de Treviño. Su hermana, en su testimonio público, dejó entrever que el diagnóstico de diabetes no detectado a tiempo terminó por ser fatal. En su publicación familiar, confirmó que la diabetes de Guillermo no fue detectada a tiempo y que condujo a una perforación estomacal, lo que, en última instancia, provocó su fallecimiento. Este detalle, que añade un matiz humano y humanoitario a la noticia, recuerda la fragilidad de la salud y la importancia de la detección temprana en condiciones que, si se descuidan, pueden volverse fatales incluso en personas activas y comprometidas con causas sociales.
El dolor no es sólo personal. A nivel comunitario, la pérdida de Treviño se percibe como una pérdida de una voz que articulaba las necesidades de inmigrantes que a menudo no tienen acceso directo a vías de defensa institucional. Su trayectoria y su forma de combinar fe y acción cívica dejan un vacío que la comunidad espera sea llenado por otros líderes emergentes que puedan continuar el trabajo que él inició, en especial en un momento en que la movilización social para la defensa de derechos y condiciones dignas para los inmigrantes continúa siendo decisiva.
La noticia llega además en medio de un cuestionamiento general sobre la atención médica y el acceso a servicios para comunidades vulnerables. El hecho de que una condición médica como la diabetes, si no se identifica a tiempo, pueda terminar en complicaciones graves y, en última instancia, en la muerte, añade una dimensión humana y clínica a la conversación pública sobre las políticas de salud y las redes de apoyo comunitario que, muchas veces, sostienen a quienes están en situación irregular o precaria. En ese sentido, el legado de Treviño no es sólo institucional, sino también práctico: la forma en que organizó y participó en redes de apoyo, la forma en que acompañó a familias a las audiencias judiciales, y su insistencia en la necesidad de un debido proceso para cada persona siguen siendo referencias para las futuras generaciones de activistas y líderes religiosos que trabajan en la frontera entre la fe y la justicia social.
Mientras la comunidad de Iowa City espera el anuncio de las arreglos funerarios, el dolor se mezcla con la gratitud por una vida dedicada a servir a quienes más lo necesitaban. Sus allegados destacan que, incluso en medio de la complejidad de las cuestiones migratorias y la presión de las políticas públicas, Treviño mantuvo su compromiso con la dignidad humana y la dignidad de la fe como motor de cambio. En su carta de despedida, los feligreses y simpatizantes encuentran la necesidad de recordar que la labor de Treviño no terminó con su muerte, sino que debe convertirse en un llamado a la acción para que las comunidades continúen defendiendo a las familias vulnerables ante la incertidumbre y la inseguridad que a menudo marcan sus vidas.
Para aquellos interesados en comprender el contexto de los movimientos que Treviño defendía, el Encuentro Mundial de Movimientos Populares, celebrado en múltiples ciudades como plataforma para discutir alternativas a las políticas actuales y para articular una visión de inclusión social y justicia, permanece como referencia de su marco de acción y del tipo de coaliciones que él buscaba forjar a nivel nacional e internacional. En medio de la pérdida, la familia y la comunidad tratan de trazar un camino hacia adelante que honre su legado, que priorice la salud y el bienestar de las personas, y que conserve viva la memoria de un líder que, con inteligencia práctica y una fe firme, trabajó para hacer de Iowa un lugar más justo para todos.
Para quienes deseen revisar recursos oficiales sobre servicios de inmigración y derechos, la página de adopción de políticas migratorias y servicios de atención corre de forma continua, como parte de la labor de protección y de asistencia a comunidades en proceso. En materia de políticas migratorias y servicios al ciudadano, el sitio oficial de inmigración mantiene guías y actualizaciones relevantes para personas que buscan entender sus derechos y las vías disponibles para regularizar su situación, incluyendo el acceso a información básica sobre el estatus de las personas y las rutas para la regularización de su situación migratoria. En momentos como estos, la claridad y la información veraz son herramientas esenciales para las comunidades que confían en estas instituciones para defender sus derechos y su dignidad. Para lectores que deseen explorar recursos institucionales oficiales, puede consultarse la página de https://www.uscis.gov/, que ofrece información general sobre inmigración y procesos aplicables a situaciones diversas.
Guillermo Treviño deja una marca indeleble en la memoria de quienes lo conocieron y en la historia de la defensa de los inmigrantes en Iowa. Su labor, su dedicación y su combate por un mundo más justo quedan, ahora, como un legado que la comunidad intenta convertir en acción concreta: continuar apoyando a las familias que más necesitan, exigir procesos justos para cada caso, y recordar que la diabetes, incluso cuando no se detecta a tiempo, puede convertirse en una tragedia que podría haberse evitado con una atención adecuada y oportuna. Con el paso de los días, las palabras de aquellos que lo conocieron, así como el vacío que deja su ausencia, servirán para recordar que la lucha por la justicia migratoria es, en última instancia, una lucha por la dignidad humana.
La conferencia y el trabajo de Treviño en torno al Encuentro Mundial de Movimientos Populares resuenan como un recordatorio de que la defensa de los derechos de los inmigrantes no es un mero debate ideológico, sino una acción cotidiana que requiere valentía, compasión y una vocación de servicio. En Iowa, donde su voz era un faro para muchas comunidades, la señal de su influencia se hará sentir en cada reunión de la parroquia, en cada reunión de la junta de Escucha Mi Voz Iowa y en cada conversación que busque dar a las familias migrantes una plataforma para ser escuchadas y tratadas con justicia. El legado de Guillermo Treviño, que se abre camino entre la fe y la lucha por los derechos humanos, continúa vivo en aquellas personas que siguen luchando por un sistema que reconozca la dignidad de cada migrante y que garantice que la salud, la seguridad y la justicia no sean privilegios, sino derechos básicos que todos merecen.
Aprende Hoy
Encuentro Mundial de Movimientos Populares → Reunión del Vaticano que convoca a líderes y activistas sociales para discutir justicia económica y social.
Escucha Mi Voz Iowa → Organización local de defensa de inmigrantes donde Treviño fue presidente de la junta y capellán.
Perforación estomacal → Urgencia médica en la que se forma un agujero en la pared del estómago, causando infección grave si no se trata.
Diabetes no diagnosticada → Enfermedad metabólica que puede ser silenciosa y provocar complicaciones graves cuando no se identifica a tiempo.
Este Artículo en Resumen
El padre Guillermo Treviño, de 39 años, murió el 31 de octubre de 2025 en Iowa City por complicaciones de diabetes no diagnosticada tras enfermarse en el Encuentro Mundial de Movimientos Populares en Roma. Pastor de St. Joseph en Columbus Junction y West Liberty y presidente de Escucha Mi Voz Iowa, acompañó a inmigrantes a audiencias federales y defendió condiciones laborales y acceso al idioma. Su muerte provocó luto en la comunidad y reavivó la urgencia de mejorar el acceso a detección y atención de la diabetes en comunidades inmigrantes.
— Por VisaVerge.com
