Puntos Clave
• Azul presentó bancarrota Capítulo 11 en EE.UU. el 28 de mayo de 2025 por deuda de $5.35 mil millones.
• United y American Airlines respaldan financiamiento de $1.6 mil millones y reestructuración de deuda.
• Azul continuará vuelos durante el proceso, asegurando operaciones y protección laboral para empleados.
El 28 de mayo de 2025, Azul Brazilian Airlines presentó oficialmente una solicitud de protección por bancarrota bajo el Capítulo 11 en un tribunal de Estados Unidos 🇺🇸. Este hecho marca un momento importante en la aviación latinoamericana, ya que Azul se convierte en la tercera gran aerolínea brasileña en buscar protección por bancarrota en los últimos cinco años. La medida busca permitir a la compañía reorganizar sus finanzas y operaciones para superar una crisis económica profunda que ha afectado a la industria aérea en la región.
¿Qué significa la bancarrota bajo el Capítulo 11?

El Capítulo 11 es un proceso legal en Estados Unidos 🇺🇸 que permite a las empresas reorganizar sus deudas y operaciones mientras continúan funcionando. A diferencia de una bancarrota total, donde la empresa cierra, el Capítulo 11 ofrece un espacio para negociar con acreedores, obtener financiamiento y ajustar la estructura financiera para intentar salir fortalecida. En el caso de Azul, esta protección busca darle tiempo para reestructurar una deuda que supera los 5 mil millones de dólares.
Detalles clave del proceso de bancarrota de Azul
Azul ha presentado un plan de reestructuración que incluye varios puntos importantes:
- Obtención de financiamiento por 1.6 mil millones de dólares durante el proceso de bancarrota para mantener operaciones y cubrir gastos inmediatos.
- Reducción de más de 2 mil millones de dólares en deuda a través de acuerdos con acreedores.
- Inversión de 950 millones de dólares en capital una vez que la aerolínea salga del proceso de bancarrota.
- Apoyo de grandes aerolíneas estadounidenses, incluyendo United Airlines y American Airlines, que respaldan la reestructuración.
- Continuidad de operaciones, con el CEO John Rodgerson asegurando que “Azul sigue volando – hoy, mañana y en el futuro”.
Este respaldo de United Airlines y American Airlines es especialmente relevante, ya que refleja un interés estratégico en la aviación latinoamericana y podría influir en las alianzas y competencia regional.
Contexto financiero y causas de la crisis
La crisis financiera de Azul tiene varias causas que se han acumulado en los últimos años:
- Deuda elevada desde la pandemia de COVID-19, cuando la demanda de vuelos cayó drásticamente.
- Incremento del 50% en la deuda durante el primer trimestre de 2025 en comparación con el mismo período de 2024.
- Problemas macroeconómicos, como la inflación y la volatilidad del real brasileño, que afectan costos y operaciones.
- Dificultades en la cadena de suministro de la industria aérea, que generan retrasos y costos adicionales.
Antes de la bancarrota, Azul intentó negociar con sus acreedores para convertir préstamos por 550 millones de dólares en acciones y obtener financiamiento adicional mediante bonos. Sin embargo, estas medidas no fueron suficientes para cubrir la deuda total de aproximadamente 5.35 mil millones de dólares (30.5 mil millones de reales brasileños).
Impacto en el mercado y reacciones
La noticia de la bancarrota provocó una caída abrupta en el valor de las acciones de Azul, que bajaron más del 40% el día del anuncio. Actualmente, las acciones se cotizan alrededor de 0.50 dólares por unidad, lo que representa una pérdida de más del 71% desde principios de 2025.
Este desplome refleja la incertidumbre que genera la situación financiera de la aerolínea, pero también la confianza en que el proceso de reestructuración pueda estabilizar la empresa a largo plazo.
Implicaciones estratégicas para la aviación en América Latina
La bancarrota de Azul tiene un impacto importante en la dinámica del mercado aéreo latinoamericano:
- La participación de American Airlines en la reestructuración es llamativa, ya que esta aerolínea estadounidense es socio e inversor de Gol, uno de los principales competidores de Azul en Brasil. Esto crea una situación compleja donde American Airlines tiene vínculos con ambas grandes aerolíneas brasileñas.
- En 2025, Azul y Gol firmaron un memorando de entendimiento no vinculante para explorar una posible fusión que habría creado la aerolínea más grande de Brasil, superando a LATAM en cuota de mercado.
- La bancarrota de Azul ocurre justo cuando Gol se prepara para salir de su propio proceso de bancarrota bajo el Capítulo 11, iniciado a principios de 2024 y con finalización prevista para junio de 2025.
Este escenario podría modificar las alianzas y la competencia en la región, con posibles fusiones o acuerdos estratégicos que cambien el mapa de la aviación en América Latina.
Contexto histórico y tendencias regionales
La situación de Azul no es un caso aislado. En los últimos cinco años, Brasil ha visto a sus tres principales aerolíneas solicitar protección bajo el Capítulo 11:
- Gol (Brasil) – presentó bancarrota a principios de 2024 y espera completar su reestructuración en junio de 2025.
- LATAM Airlines – ya salió de su proceso de bancarrota.
- Azul – la más reciente en presentar solicitud.
Además, otras aerolíneas importantes en América Latina han pasado por procesos similares:
- Avianca (Colombia) completó su reestructuración.
- Aeroméxico también salió exitosamente de bancarrota.
- En abril de 2025, Voepass, otra aerolínea brasileña, solicitó recuperación judicial con deudas por 209.2 millones de reales (aproximadamente 36.7 millones de dólares).
Estos movimientos reflejan un sector aéreo que ha sufrido un fuerte impacto por la pandemia y enfrenta retos económicos y operativos que requieren ajustes profundos.
Breve historia de Azul Brazilian Airlines
Azul fue fundada en 2008 por David Neeleman, un empresario conocido por crear varias aerolíneas exitosas como JetBlue y Breeze Airways. Antes de sus problemas financieros, Azul se había consolidado como la tercera aerolínea más grande de Brasil, con una red importante de vuelos domésticos e internacionales.
El modelo de negocio de Azul se basó en ofrecer vuelos a ciudades menos atendidas, complementando la oferta de otras aerolíneas y capturando un segmento de mercado específico. Sin embargo, la acumulación de deuda y las condiciones económicas adversas han llevado a la necesidad de una reestructuración profunda.
¿Qué significa esta bancarrota para los pasajeros y empleados?
A pesar de la bancarrota, Azul ha asegurado que sus vuelos continuarán operando con normalidad durante el proceso. Esto es importante para los pasajeros que dependen de sus servicios para viajar dentro y fuera de Brasil.
Para los empleados, el proceso puede generar incertidumbre, pero la intención de la empresa es mantener la operación y salir fortalecida, lo que podría preservar empleos a largo plazo. Sin embargo, en procesos de bancarrota siempre existe el riesgo de ajustes laborales y cambios en la estructura organizacional.
Perspectivas futuras y próximos pasos
El proceso de bancarrota de Azul será seguido de cerca por la industria, los inversores y los reguladores. Algunos puntos clave a observar son:
- La capacidad de Azul para asegurar el financiamiento prometido y negociar con sus acreedores.
- El impacto que tendrá la participación de United Airlines y American Airlines en la reestructuración y posibles alianzas futuras.
- La evolución de la posible fusión entre Azul y Gol, que podría cambiar el panorama competitivo en Brasil y América Latina.
- La respuesta del mercado y la recuperación del valor de las acciones de Azul.
El CEO John Rodgerson ha señalado que esta bancarrota es un paso “proactivo” para transformar la empresa y posicionarla como líder en aspectos clave de su negocio. La compañía busca salir de este proceso con una estructura financiera más sólida y una operación más eficiente.
Conclusión
La solicitud de bancarrota bajo el Capítulo 11 por parte de Azul Brazilian Airlines representa un momento crucial para la aviación en Brasil 🇧🇷 y América Latina. La combinación de desafíos económicos, deuda acumulada y cambios en el mercado ha llevado a esta medida que busca asegurar la viabilidad futura de la aerolínea.
El respaldo de grandes aerolíneas estadounidenses como United Airlines y American Airlines añade un componente estratégico que podría influir en las alianzas y competencia regional. Además, la situación de Azul se enmarca en una tendencia más amplia de reestructuraciones en el sector aéreo latinoamericano tras la pandemia.
Para pasajeros, empleados y socios comerciales, la prioridad será que Azul mantenga sus operaciones y logre una recuperación sostenible. El proceso de bancarrota ofrece una oportunidad para ajustar su modelo de negocio y finanzas, pero también implica riesgos y desafíos que deberán gestionarse con cuidado.
Para quienes estén interesados en temas de movilidad internacional y empleo en la industria aérea, esta situación es un ejemplo claro de cómo las condiciones económicas globales y regionales pueden afectar a las empresas y a las personas que dependen de ellas.
Para más información oficial sobre procesos de bancarrota y reestructuración en Estados Unidos 🇺🇸, puede consultarse la página del United States Courts sobre el Capítulo 11.
Este análisis ha sido elaborado con base en datos oficiales y reportes especializados, incluyendo información de VisaVerge.com, que destaca la importancia de esta bancarrota en el contexto de la aviación latinoamericana y las implicaciones para el mercado y las alianzas aéreas.
Aprende Hoy
Capítulo 11 → Proceso legal en EE.UU. que permite la reorganización de deudas mientras la empresa opera.
Reestructuración de deuda → Acuerdo para reducir o modificar pagos de deudas y mejorar la viabilidad financiera.
Inversión de capital → Dinero invertido a cambio de participación accionaria en una empresa.
Protección por bancarrota → Medida legal que detiene acciones de acreedores durante la reorganización financiera.
Cadena de suministro → Conjunto de proveedores y procesos para obtener y entregar bienes y servicios.
Este Artículo en Resumen
Azul Brazilian Airlines solicitó protección por bancarrota bajo el Capítulo 11 para reorganizar deuda millonaria. United y American Airlines apoyan el plan para mantener operaciones y fortalecer la aerolínea. Esta situación refleja los retos del sector aéreo latinoamericano tras la pandemia y posibles fusiones estratégicas.
— Por VisaVerge.com