Puntos Clave
• Toque de queda en el centro de Los Ángeles levantado el 11 de junio de 2025 tras disturbios.
• Despliegue de más de 4,000 Guardias Nacionales y 700 marines en apoyo a ICE.
• 112 arrestos reportados el 9 de junio; protestas se extendieron a otras ciudades.
El toque de queda impuesto en el centro de Los Ángeles fue levantado la mañana del 11 de junio de 2025, tras varios días de disturbios provocados por la intensificación de las acciones federales en materia de inmigración ordenadas por el presidente Donald Trump. Esta medida, que afectó un área de aproximadamente una milla cuadrada delimitada por las autopistas 5, 10 y 110, estuvo vigente desde la noche del 10 de junio hasta la madrugada del día siguiente, con un horario de 8:00 p.m. a 6:00 a.m. La decisión de levantar el toque de queda se dio en medio de un ambiente aún tenso, con protestas que se han extendido a otras ciudades importantes de Estados Unidos 🇺🇸, como Nueva York, Chicago, San Francisco, Boston, Dallas y Austin.
Contexto y origen del toque de queda

El toque de queda fue anunciado por la alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, como respuesta a las protestas que estallaron tras una serie de redadas masivas realizadas por la agencia federal de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) en el distrito de la moda de Los Ángeles y otros lugares de trabajo. Estas redadas, dirigidas principalmente contra inmigrantes indocumentados, generaron enfrentamientos entre manifestantes y la policía, lo que llevó a la imposición de la restricción para contener los disturbios y proteger la seguridad pública.
Durante las noches en que estuvo vigente el toque de queda, las autoridades permitieron excepciones para personal de emergencia, residentes, trabajadores que se desplazaban hacia o desde sus empleos, y medios de comunicación acreditados. Sin embargo, la medida afectó significativamente la vida cotidiana, el transporte público y las operaciones comerciales en el área afectada.
Despliegue militar y respuesta federal
El presidente Donald Trump ordenó el despliegue de más de 4,000 miembros de la Guardia Nacional y 700 marines en Los Ángeles para apoyar las operaciones de ICE y mantener el orden público. Aunque los marines aún no han sido vistos en la ciudad, la presencia militar marcó una escalada significativa en la aplicación de la ley migratoria, con la Guardia Nacional autorizada a detener temporalmente a personas que atacaran a oficiales, aunque las detenciones formales debían ser realizadas por la policía.
Esta intervención federal generó fuertes críticas por parte de las autoridades estatales y locales. El gobernador de California, Gavin Newsom, calificó la acción como un “abuso descarado de poder” y presentó una moción de emergencia en un tribunal federal para limitar el papel de las tropas desplegadas, solicitando que su función se restringiera únicamente a la protección de edificios federales. La audiencia para esta moción estaba programada para el 12 de junio de 2025.
Por su parte, la alcaldesa Karen Bass destacó que los disturbios se concentraron en un área pequeña y coordinó esfuerzos con la policía y líderes empresariales para restaurar la calma tras el levantamiento del toque de queda.
Impacto en la comunidad inmigrante y reacciones sociales
Los Ángeles cuenta con una población estimada de 950,000 inmigrantes indocumentados, según datos del Migration Policy Institute. Las redadas y la presencia militar han generado miedo y ansiedad en esta comunidad, que en su mayoría trabaja en sectores de bajos salarios y que ahora enfrenta un ambiente de incertidumbre y hostilidad.
Además, se han reportado casos de inmigrantes legales que fueron detenidos o interrogados por agentes de ICE, lo que ha levantado preocupaciones sobre prácticas de perfil racial y violaciones al debido proceso. Líderes comunitarios y defensores de derechos civiles han condenado las redadas y la militarización de la aplicación de la ley migratoria, calificándolas como tácticas de intimidación que afectan no solo a los inmigrantes sino también a sus familias y comunidades.
Las protestas, inicialmente concentradas en el centro de Los Ángeles, se han extendido a otras ciudades, con manifestantes que exigen el fin de las operaciones federales y la protección de los derechos de los inmigrantes. Organizaciones civiles han anunciado planes para nuevas movilizaciones en los próximos días, lo que indica que la tensión social podría mantenerse o incluso aumentar.
Detalles sobre las detenciones y enfrentamientos
Durante la noche del 9 de junio, la policía de Los Ángeles reportó un total de 112 arrestos relacionados con los disturbios: 14 por saqueo, 96 por no dispersarse cuando se les ordenó, uno por agresión con arma mortal, uno por resistencia al arresto y uno por vandalismo. Además, dos oficiales de la policía resultaron heridos, aunque fueron atendidos y dados de alta.
Estas cifras reflejan la intensidad de los enfrentamientos y la complejidad de manejar una situación que combina protestas legítimas con actos de violencia y desorden público.
Procedimientos durante el toque de queda y las redadas
El toque de queda exigía que todas las personas dentro del área delimitada permanecieran en sus hogares o lugares de trabajo desde las 8:00 p.m. hasta las 6:00 a.m., salvo excepciones específicas. La policía y la Guardia Nacional patrullaban las calles para hacer cumplir esta medida y evitar que se repitieran actos de vandalismo o violencia.
Las redadas de ICE consistieron en la entrada a lugares de trabajo para identificar y detener a personas sin estatus migratorio legal. Los detenidos eran procesados para su posible deportación o para investigaciones adicionales. Estas acciones, aunque dirigidas a combatir la inmigración ilegal, afectaron a trabajadores que no tenían antecedentes penales, lo que generó críticas sobre la proporcionalidad y el enfoque de la política migratoria.
Perspectivas de los actores involucrados
- Presidente Donald Trump: Defendió la operación como una medida necesaria para combatir el crimen y la inmigración ilegal, calificando a los manifestantes como “insurrectos” y amenazando con invocar la Ley de Insurrección para controlar la situación.
- Gobernador Gavin Newsom: Se opuso firmemente al despliegue militar, denunciando que pone en riesgo la soberanía estatal y los derechos civiles, además de exponer a las tropas a situaciones para las que no están entrenadas.
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Alcaldesa Karen Bass: Buscó equilibrar la seguridad pública con el respeto a los derechos de los ciudadanos, coordinando con las fuerzas del orden y líderes comunitarios para restaurar la calma.
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ICE y agentes federales: Justificaron las redadas como parte de una estrategia para eliminar a criminales y proteger la seguridad nacional, aunque reconocieron que muchos detenidos no tenían antecedentes penales.
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Líderes comunitarios y defensores de derechos civiles: Criticaron la militarización y las redadas como tácticas que generan miedo y división, y pidieron un enfoque más humano y justo en la política migratoria.
Implicaciones para la inmigración y control de aduanas
La situación en Los Ángeles refleja un cambio importante en la forma en que el gobierno federal está manejando la inmigración, con un uso más agresivo de la fuerza y la participación militar en operaciones civiles. Esto plantea preguntas sobre el equilibrio entre la seguridad nacional y los derechos humanos, así como sobre el papel de las autoridades locales frente a las acciones federales.
La militarización de la aplicación de la ley migratoria puede tener efectos duraderos en la confianza de las comunidades inmigrantes hacia las instituciones, dificultando la cooperación con la policía y afectando la integración social y económica.
Además, el uso de la Guardia Nacional y Marines en apoyo a ICE podría sentar un precedente para futuras intervenciones militares en asuntos civiles, lo que genera preocupación entre expertos legales y defensores de derechos civiles.
Repercusiones económicas y sociales
El toque de queda y las redadas han interrumpido la actividad económica en el centro de Los Ángeles, afectando a negocios, transporte y trabajadores. La incertidumbre y el miedo han llevado a una reducción en la movilidad y el consumo, con impactos negativos en la economía local.
Socialmente, la situación ha profundizado las divisiones y tensiones, no solo entre inmigrantes y autoridades, sino también dentro de la comunidad en general, que observa con preocupación el uso de la fuerza y las posibles violaciones a los derechos civiles.
Próximos pasos y perspectivas legales
El 12 de junio de 2025 se llevó a cabo una audiencia en un tribunal federal para decidir sobre la moción presentada por California que busca limitar el papel de la Guardia Nacional y las tropas federales a la protección de edificios federales, restringiendo su participación en tareas de control de multitudes o detenciones.
El resultado de esta audiencia será clave para definir el alcance futuro de la militarización en la aplicación de la ley migratoria y para establecer límites claros entre las competencias federales y estatales.
Mientras tanto, las protestas continúan y se esperan nuevas movilizaciones en los próximos días, lo que mantiene la atención nacional sobre la situación en Los Ángeles y otras ciudades afectadas.
Recursos oficiales y recomendaciones para la comunidad
Para quienes buscan información actualizada y oficial sobre el toque de queda, las operaciones de ICE y la situación en Los Ángeles, se recomienda consultar las siguientes fuentes:
- Sitio oficial de la ciudad de Los Ángeles: lacity.gov/highlights/curfew-announced-downtown-los-angeles
- Departamento de Policía de Los Ángeles: lapdonline.org
- Oficina del Gobernador de California: gov.ca.gov
- Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE): ice.gov
- Comando Norte de Estados Unidos: northcom.mil
Además, es importante que los inmigrantes y sus familias conozcan sus derechos y busquen asesoría legal confiable para enfrentar cualquier situación relacionada con detenciones o procesos migratorios.
Conclusión
El levantamiento del toque de queda en el centro de Los Ángeles no significa el fin de la crisis provocada por la política de inmigración del presidente Donald Trump y las acciones de Inmigración y Control de Aduanas. La militarización de la aplicación de la ley migratoria, las redadas masivas y la respuesta social han generado un ambiente de tensión y división que seguirá evolucionando en los próximos días.
La situación pone en evidencia la complejidad de abordar la inmigración en Estados Unidos 🇺🇸, donde las políticas federales, estatales y locales a menudo chocan, y donde las comunidades inmigrantes enfrentan desafíos que van más allá de la legalidad, afectando su seguridad, bienestar y derechos fundamentales.
Para quienes viven o trabajan en las áreas afectadas, es crucial mantenerse informados a través de fuentes oficiales y buscar apoyo legal cuando sea necesario. La atención nacional y las decisiones judiciales próximas definirán el rumbo de esta crisis y el futuro de la política migratoria en el país.
Este análisis se basa en información actualizada al 12 de junio de 2025 y en reportes de fuentes oficiales y medios especializados. Según un análisis de VisaVerge.com, la situación en Los Ángeles representa un punto crítico en la historia reciente de la inmigración en Estados Unidos 🇺🇸, con implicaciones que podrían influir en políticas y prácticas migratorias a nivel nacional.
Aprende Hoy
Toque de queda → Restricción oficial que obliga a permanecer en interiores durante horas específicas.
ICE → Agencia federal estadounidense que realiza redadas y aplica leyes migratorias.
Guardia Nacional → Fuerza militar de reserva desplegada en emergencias o para apoyar operaciones federales.
Ley de Insurrección → Ley federal que permite al presidente usar tropas para controlar desórdenes civiles.
Inmigrantes indocumentados → Personas que viven en EE.UU. sin estatus migratorio legal.
Este Artículo en Resumen
El toque de queda en Los Ángeles fue levantado el 11 de junio tras protestas provocadas por redadas de ICE y despliegue militar federal.
— Por VisaVerge.com