Puntos Clave
• Cinco aterrizajes de emergencia ocurrieron en Rusia entre el 16 y 19 de mayo de 2025.
• Sanciones internacionales impiden acceso a repuestos, aumentando mantenimiento improvisado en aerolíneas rusas.
• Expertos prevén que más de la mitad de la flota podría quedar fuera de servicio el próximo año.
En la última semana, la aviación rusa ha enfrentado una serie inédita de situaciones críticas, sumando cinco aterrizajes de emergencia. Todos ocurrieron entre el 16 y el 19 de mayo de 2025, lo que ha generado muchas preguntas sobre la seguridad y el futuro de los vuelos comerciales en Rusia 🇷🇺. Estos eventos, aunque terminaron sin víctimas, están iluminando problemas que van más allá de simples fallos técnicos; muestran una realidad preocupante sobre el funcionamiento diario de las aerolíneas y el impacto duradero de las sanciones internacionales.
Ola de aterrizajes de emergencia: ¿Qué ocurrió realmente?

Desde el 17 hasta el 19 de mayo de 2025, cinco aviones de pasajeros, entre ellos un Airbus A330-300 operado por iFLY y varios otros aviones de grandes líneas rusas, tuvieron que aterrizar de manera forzosa debido a diferentes fallos en sus sistemas. Los casos fueron los siguientes:
- 19 de mayo de 2025: Un Airbus A330-300 de iFLY, volando de Vladivostok a Moscú, sufrió problemas técnicos en pleno vuelo. Llevaba a bordo 345 pasajeros y 12 tripulantes. Logró aterrizar sin lesiones para el pasaje ni la tripulación. Los investigadores señalaron que el origen del problema estuvo en los motores.
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18 de mayo de 2025: Un Boeing 757-200 de Azur Air, en ruta desde Kazán hacia Dalaman, tuvo que realizar un aterrizaje forzoso en Sochi tras quedarse sin un generador de motor izquierdo. Ese mismo día, un Boeing 737-800 de S7 Airlines volvió a Novosibirsk por problemas en el tren de aterrizaje.
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17 de mayo de 2025: Un Airbus A320 de S7 Airlines con unas 150 personas a bordo aterrizó de emergencia en Novosibirsk debido a una falla de motor en un vuelo de Gorno-Altaisk a Moscú.
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Alrededor del 16 o 17 de mayo: Un Airbus A320 de Aeroflot, viajando de Omsk a Moscú, también experimentó una falla de motor que obligó a un aterrizaje inmediato.
A pesar del buen manejo de cada aterrizaje de emergencia, la frecuencia de estos sucesos no deja de preocupar. Las autoridades rusas de transporte han abierto una serie de investigaciones para revisar si hubo violaciones de reglamentos de seguridad durante estas operaciones.
¿Por qué la aviación rusa atraviesa esta crisis?
Detrás de estos incidentes no hay sólo mala suerte. El verdadero telón de fondo es un cambio radical en la aviación rusa provocado por las sanciones internacionales impuestas tras el inicio del conflicto en Ucrania. Desde el año 2022, las sanciones han impactado directamente en la capacidad que tienen las aerolíneas rusas de mantener y reparar sus aeronaves, en especial las que son de fabricación occidental.
- Impacto directo en la flota aérea: Aproximadamente dos tercios de los aviones comerciales en Rusia son modelos de Airbus o Boeing. Por las sanciones, no es posible acceder a componentes originales, servicios de mantenimiento o asesoría técnica de estas firmas. Esto vuelve mucho más complicado mantenerlos seguros para los pasajeros.
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Uso de piezas de otros aviones (canibalización): Cuando no hay repuestos, las aerolíneas han comenzado a desarmar aviones que no están en uso para quitarles piezas que sus otros aviones necesitan. Esta práctica, conocida como canibalización, puede llevar a problemas de largo plazo, ya que muchas de esas piezas no fueron pensadas para intercambiarse constantemente.
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Falta de chequeos profundos: Para que un avión siga apto para volar, necesita pasar inspecciones detalladas y periódicas llamadas “C Checks” o “D Checks”. Sin acceso a equipos certificados ni a personal capacitado, completar estos chequeos se vuelve cada vez más difícil y peligroso.
Lo más preocupante es que, según lo reportado por VisaVerge.com, tanto los aviones importados como los modelos rusos SSJ100 enfrentan obstáculos similares, ya que muchos componentes de estos últimos también son importados. El pronóstico es poco alentador: si la situación sigue igual, la consultora Oliver Wyman estima que más de la mitad de la flota aérea activa en Rusia podría quedar fuera de servicio el próximo año.
Más incidentes, menos reportes oficiales
Los datos duros muestran que la frecuencia de incidentes no para de crecer. Este año, al menos diez aviones de pasajeros rusos sufrieron aterrizajes de emergencia por malfunciones. En los primeros once meses del año pasado, se documentaron más de doscientos incidentes de aviación en todo el país, un aumento de casi el 25% con respecto a años anteriores. Casi la mitad de estos problemas estaban vinculados a fallos en motores o sistemas de aterrizaje.
Sin embargo, los expertos creen que la cifra real podría ser más alta, dado que en sectores controlados por el Estado muchas fallas pueden no ser notificadas públicamente. Esto es especialmente serio porque las acciones correctivas oportunas dependen de una comunicación clara y honesta de lo que pasa en cada vuelo.
Cómo se vivieron los aterrizajes de emergencia
A continuación, un resumen de los cinco aterrizajes más recientes como referencia:
Fecha | Aerolínea | Modelo de avión | Ruta | Causa |
---|---|---|---|---|
19 de mayo | iFLY | Airbus A330-300 | Vladivostok–Moscú | Problema técnico/motor |
18 de mayo | Azur Air | Boeing 757-200 | Kazán–Dalaman (aterriza en Sochi) | Generador de motor falló |
18 de mayo | S7 Airlines | Boeing 737-800 | Novosibirsk–Irkutsk | Fallo en tren de aterrizaje |
17 de mayo | S7 Airlines | Airbus A320 | Gorno-Altaisk–Moscú (aterriza en NSK) | Falla de motor |
16/17 de mayo | Aeroflot | Airbus A320 | Omsk–Moscú | Falla de motor |
(NSK significa Novosibirsk)
En cada uno de estos casos, desde el Airbus A330-300 del 19 de mayo hasta los incidentes en los días previos, el resultado fue el mismo: todos terminaron sin víctimas porque la tripulación actuó a tiempo. No obstante, la repetición de episodios tan graves en tan poco tiempo hace que la preocupación sea mucho mayor.
¿Qué significa esto para los pasajeros y el futuro de la aviación rusa?
Para quienes viajan en territorio ruso hoy en día, volar ya no es tan confiable como antes. Cuando una línea aérea tiene que usar piezas viejas o de otros aviones, hacer mantenimientos improvisados o no puede hacer revisiones completas, los riesgos aumentan a futuro. Es posible que continúen los aterrizajes de emergencia o que los servicios se reduzcan mucho si las autoridades deciden retirar aviones inseguros de circulación.
Por ahora, la mayoría de los vuelos con problemas han logrado regresar sanos y salvos. Pero hay preguntas que quedan abiertas:
- ¿Cuánto tiempo se podrá mantener en vuelo a los aviones sin partes nuevas ni ayuda de los fabricantes?
- ¿Podrán las líneas rusas crear canales propios de suministro de repuestos seguros en el mediano plazo?
- ¿Qué efecto tiene para quienes dependen del avión para viajar largas distancias dentro de Rusia, donde a veces no hay otra opción de transporte?
Son dudas profundas que no tienen respuestas fáciles. Lo cierto es que mientras no se solucione el acceso a partes originales y servicios técnicos, los riesgos seguirán creciendo.
¿Hay soluciones posibles al problema?
La solución más directa, aunque difícil de alcanzar en el contexto actual, sería reestablecer las relaciones comerciales con Airbus y Boeing o acceder a repuestos a través de canales alternativos aprobados internacionalmente. Por ahora, esa opción parece lejana.
Otra alternativa propuesta dentro de la industria es acelerar el desarrollo de aviones 100% rusos, con piezas nacionales y soporte en el país. Sin embargo, incluso modelos muy usados en Rusia como el SSJ100 dependen en gran parte de componentes de fuera, especialmente electrónicos y de motor, lo que limita la independencia tecnológica que se necesita para enfrentar la situación actual.
Algunas voces incluso sugieren rediseñar todo el régimen de regulación técnica y de certificación para ajustarlo a las condiciones locales, pero esto podría reducir aún más la confianza internacional en la aviación rusa y complicar los vuelos a otros países.
Para los interesados en conocer las regulaciones de seguridad vigentes y los requisitos técnicos para operadores aéreos, la autoridad oficial rusa dispone de información y manuales detallados (puedes ver más información oficial aquí). Es importante que cualquier cambio que se piense implementar mantenga la prioridad por el bienestar de pasajeros y tripulaciones.
Opiniones divididas: ¿Es culpa sólo de las sanciones?
Aunque la mayor parte de las fuentes señalan a las sanciones internacionales como la raíz del problema, hay quienes consideran que parte de la responsabilidad recae también en la falta de previsión de las aerolíneas y autoridades locales.
Según algunos técnicos, las líneas debieron acelerar la capacitación de personal de mantenimiento, hacer reservas más grandes de repuestos y buscar alianzas con países y fabricantes alternativos mucho antes del conflicto. Por el otro lado, los que apoyan al sector explican que la magnitud del aislamiento y la cascada de sanciones era imposible de prever y planificar con tiempo suficiente.
Ambas posiciones tienen algún grado de razón; la realidad es que la crisis ha colocado a la aviación rusa frente a un escenario de presión inédita y desafíos logísticos muy complejos.
¿Qué sigue para la aviación rusa?
Según el análisis de VisaVerge.com y otros medios, la continuidad del transporte aéreo regular en Rusia depende hoy casi por completo de la rapidez con la que se puedan encontrar soluciones para el abastecimiento de piezas y el soporte técnico confiable.
Si los expertos de Oliver Wyman están en lo cierto, en menos de un año puede quedar fuera de servicio más de la mitad de la flota actual. Esto golpearía a los pasajeros, a las empresas y al propio Estado ruso, recortando rutas, aumentando el precio de los pasajes y poniendo en duda cualquier plan de expansión. Además, una caída masiva en la actividad aérea también tendría un impacto grande sobre las conexiones laborales, sociales y económicas dentro de un país de dimensiones enormes como Rusia 🇷🇺.
Si bien, de acuerdo a las estadísticas, hasta ahora se ha evitado una tragedia directa gracias a la pericia de pilotos y personal de vuelo, la probabilidad de incidentes graves crecerá si la aviación rusa depende por mucho tiempo más de aviones con mantenimientos incompletos y repuestos improvisados.
Resumiendo los puntos clave
- Cinco aterrizajes de emergencia en menos de una semana reflejan el momento crítico que vive la aviación rusa.
- El Airbus A330-300, junto con otros modelos occidentales, se mantiene en el aire a pesar de la escasez de partes, a través de prácticas riesgosas como la canibalización de piezas.
- La causa central de los problemas es el bloqueo a la importación de repuestos y servicios técnicos por parte de los países occidentales tras la invasión a Ucrania.
- Los expertos prevén más incidentes y una posible reducción drástica de vuelos si no se resuelve pronto el suministro de piezas.
- Sin cambios grandes, la aviación rusa puede enfrentar una crisis aún más profunda, afectando a pasajeros y la estructura de transporte del país.
Para más información sobre el estado de la aviación civil y guía sobre seguridad aérea, puedes consultar el sitio oficial de la Agencia Federal de Transporte Aéreo de Rusia.
En este difícil contexto, es esencial que los pasajeros y trabajadores estén bien informados y tomen precauciones al elegir vuelos dentro de Rusia 🇷🇺, recordando siempre que la seguridad debe ser la prioridad máxima en cualquier viaje aéreo.
Aprende Hoy
Aterrizaje de emergencia → Descenso forzoso e inesperado de una aeronave por fallas técnicas o peligro para evitar un accidente mayor.
Sanciones internacionales → Restricciones económicas y comerciales impuestas por países a Rusia tras el conflicto en Ucrania.
Canibalización → Uso de piezas de aviones inactivos para reparar otros ante la falta de repuestos originales disponibles.
C Check → Inspección técnica profunda que debe realizarse periódicamente para garantizar la seguridad y certificación de un avión.
Airbus A330-300 → Modelo de avión comercial de fuselaje ancho y largo alcance fabricado por Airbus, común en aerolíneas rusas.
Este Artículo en Resumen
La aviación rusa atraviesa una crisis: cinco aterrizajes de emergencia en una semana y falta de repuestos por sanciones internacionales. Las aerolíneas canibalizan aviones para mantener vuelos, aumentando riesgos. Si no cambian las condiciones, más de la mitad de la flota podría dejar de operar el próximo año, alertan expertos.
— Por VisaVerge.com
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