Puntos Clave
- El NFAP report indica más de 1.1 millones de trabajadores nacidos fuera del país perdieron empleo desde enero de 2025.
- La caída alcanzó un máximo de 1.5 millones en primavera de 2025, rompiendo una década de crecimiento constante.
- Causas principales: medidas migratorias más estrictas, recortes a autorizaciones humanitarias y despidos en categorías de visas con 60 días.
Un análisis exhaustivo de datos oficiales revela una caída histórica en el tamaño de la fuerza laboral de trabajadores nacidos fuera del país desde el inicio de la administración Trump, con efectos que se extienden a múltiples sectores y comunidades.

Según el análisis del National Foundation for American Policy (NFAP), basado en datos gubernamentales, más de 1.1 millones de trabajadores nacidos fuera del país han perdido su empleo desde enero de 2025, y las pérdidas alcanzaron un pico de aproximadamente 1.5 millones en la primavera de 2025. Este fenómeno representa la contracción más aguda en la fuerza laboral inmigrante en más de una década y ocurre en un contexto de políticas migratorias más restrictivas, debilitamiento de ciertos programas de estatus legal y una economía que encara un enfriamiento gradual.
Tendencia histórica y comparación reciente
La caída no es homogénea. Entre 2014 y 2024, la fuerza laboral nacida fuera del país crecía en promedio alrededor de 652,000 personas por año. La actual reversión marca una ruptura notable de esa trayectoria.
- En 2024, el desempleo entre trabajadores nacidos fuera del país fue 4.2%, frente a 4.0% entre nativos.
- Hubo una subida general de 0.6 puntos porcentuales en ese grupo respecto al año anterior.
- A nivel agregado, el desempleo también se movió al alza, reflejando una economía con menor ritmo de creación de puestos y una demanda cambiante por habilidades específicas.
Estas cifras implican repercusiones no solo en el empleo directo, sino también en sectores dependientes de talento internacional: tecnología, manufactura, servicios y agricultura.
Factores que impulsan la caída
El NFAP identifica una combinación de factores:
- Cambios en políticas de inmigración y medidas de control laboral que redujeron la llegada de nuevos trabajadores.
- Eliminación o limitación de programas como la modalidad de Protección Temporal (TPS) y otros procesos humanitarios que permitían permanencia laboral formal.
- Pérdida o terminación de estatus autorizado para trabajadores que previamente tenían permisos, desconectándolos del empleo formal.
- Efectos específicos en categorías de visas no inmigrantes, como H-1B, donde la pérdida de empleo puede activar un período de gracia de 60 días para hallar nuevo patrocinio o salir del país.
En conjunto, estas medidas han elevado la vulnerabilidad de trabajadores nacidos fuera del país ante despidos y cambios de estatus.
Impacto sectorial y dinámicas económicas
El panorama económico muestra debilidad en varios frentes:
- La creación neta de empleos se ha moderado, especialmente en sectores con alta presencia de trabajadores inmigrantes.
- Manufactura: cerca de 42,000 empleos perdidos desde abril de 2025 y 12,000 despidos registrados en agosto.
- Tecnología: grandes oleadas de despidos que superaron 22,000, con un golpe significativo en febrero (16,084 despidos).
- Vacantes: las ofertas de trabajo en julio de 2025 cayeron a 7.18 millones, por debajo de la marca de 7.2 millones por segunda vez desde 2020.
Estas dinámicas crean un círculo vicioso: menos empleo para trabajadores nacidos fuera del país, mayores costos laborales para empleadores y, en ocasiones, decisiones de automatización o deslocalización para compensar la menor disponibilidad de mano de obra.
Consecuencias para empleadores y recomendaciones prácticas
Para empresas que dependen de talento migrante, las tendencias sugieren una necesidad de mayor cautela en cumplimiento y planificación de personal.
- Los titulares de H-1B y otras visas no inmigrantes enfrentan escenarios donde una pérdida de empleo puede desencadenar períodos de gracia limitados, creando incertidumbre para empleados y recursos humanos.
- Recomendaciones prácticas para empleadores:
- Revisar y ajustar prácticas de cumplimiento y patrocinio.
- Evaluar planes de retención y rutas de transferencia de patrocinio.
- Considerar opciones de talento local o automatización cuando sea viable y conforme a la ley.
- Fortalecer la documentación y los protocolos internos para reducir riesgos de incumplimiento.
En términos de políticas públicas, se espera un debate entre quienes creen que estas medidas protegen a trabajadores estadounidenses y quienes alertan sobre efectos negativos en sectores clave y aumentos de costos de producción.
Perspectiva de actores y observadores
El análisis del NFAP recoge distintas voces:
- Quienes respaldan la orientación de la administración argumentan que las políticas buscan priorizar talento de alto nivel y reducir la inmigración irregular, protegiendo empleos estadounidenses y reasignando talento a roles mejor remunerados.
- Economistas y grupos de defensa de inmigrantes advierten que un recorte amplio puede provocar cuellos de botella en cadenas de suministro, mayores costos y presiones en comunidades que dependen de remesas y presencia laboral extranjera.
- Cámaras y gremios empresariales señalan preocupaciones sobre retención de talento, costos de cumplimiento y la necesidad de estrategias para reducir la volatilidad laboral.
La tarea que subyace es equilibrar la protección de los trabajadores locales con la necesidad de talento que impulsa sectores estratégicos, recordando que detrás de cada cifra hay personas, familias y comunidades.
Consejos para trabajadores y comunidades afectadas
La situación exige apoyo institucional y asesoría legal accesible. Pasos recomendados para trabajadores:
- Comprender las opciones de estatus, plazos de gracia y posibilidades de transición tras un despido.
- Consultar con abogados de inmigración para explorar alternativas y derechos.
- Revisar ofertas de empleo que acepten patrocinio o que valoren habilidades transferibles.
- Planificar la movilidad y la seguridad financiera ante cambios de estatus.
Para empleadores y empleados, las acciones inmediatas incluyen:
- Si pierdes empleo con visa no inmigrante:
- Comprende tu periodo de gracia.
- Consulta con un abogado para explorar transferencia de patrocinio u otras opciones.
- Si eres empleador:
- Fortalece la documentación de cumplimiento.
- Revisa políticas de patrocinio.
- Contempla planes de contingencia para escasez de mano de obra.
Datos, vigilancia y fuentes clave
La continuidad de las publicaciones del BLS y del NFAP será crucial para seguir la evolución. Autoridades laborales y migratorias deben mantener transparencia en indicadores como:
- Tasas de desempleo por cohortes migrantes.
- Variaciones sectoriales mensuales.
- Efectos de políticas nuevas.
Fuentes recomendadas para ampliar la información:
- Oficina de Estadísticas Laborales (BLS): https://www.bls.gov
- Servicios de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS): https://www.uscis.gov
- NFAP y análisis independientes como VisaVerge.com, que destacan el posible carácter de punto de inflexión en la relación entre política migratoria y crecimiento económico.
Conclusión y camino hacia adelante
La coexistencia de políticas más restrictivas y un entorno económico volátil genera un giro significativo para la fuerza laboral nacida fuera del país. El futuro dependerá de:
- Decisiones políticas sobre reformas migratorias.
- La capacidad de empresas, trabajadores y comunidades para adaptarse.
- Datos continuos que guíen políticas, inversión y movilidad laboral internacional.
En última instancia, la historia de 2025 y sus efectos continúan escribiéndose. Los datos seguirán guiando las políticas y las decisiones personales en un paisaje migratorio que cambia día a día.
Aprende Hoy
trabajador nacido fuera del país → Persona empleada en EE. UU. que nació en otro país, incluyendo titulares de visas y residentes legales.
NFAP → National Foundation for American Policy, organización que analiza datos y políticas sobre inmigración.
H-1B → Visa no inmigrante para ocupaciones especializadas; a menudo permite un periodo de gracia de 60 días tras perder el empleo.
TPS (Protección Temporal) → Estatus humanitario que permite a nacionales de ciertos países trabajar legalmente temporalmente en EE. UU.
Formularios I-129, I-539, I-765 → Peticiones y solicitudes ante USCIS para patrocinio de trabajadores, cambio/extensión de estatus y autorización de empleo, respectivamente.
autorización de empleo → Permiso oficial emitido por USCIS que habilita a un extranjero a trabajar en Estados Unidos.
periodo de gracia de 60 días → Ventana temporal que algunas visas otorgan tras la terminación del empleo para hallar nuevo patrocinio o cambiar estatus.
Este Artículo en Resumen
El análisis del NFAP, con base en datos federales, revela una contracción histórica de la fuerza laboral nacida fuera del país: más de 1.1 millones de trabajadores han perdido empleo desde enero de 2025, con un pico de 1.5 millones en marzo. Esto revierte una década de crecimiento promedio anual de aproximadamente 652,000 trabajadores extranjeros entre 2014 y 2024. Los factores incluyen medidas migratorias más estrictas, recortes o límites a programas humanitarios que proporcionaban autorización laboral y despidos en categorías de visa que activan periodos de gracia de 60 días para encontrar nuevo patrocinio. Sectores como hostelería, servicios alimentarios, agricultura, manufactura y tecnología enfrentan problemas de contratación y consideran aumentos salariales, automatización o traslado de funciones al extranjero. Las consecuencias alcanzan a familias, negocios locales y presupuestos públicos. El descenso podría extenderse hasta 2026 según políticas y evolución económica. Se recomienda a trabajadores y empleadores priorizar documentación, plazos y asesoría legal.
— Por VisaVerge.com