Puntos Clave
• Delta canceló 7,000 vuelos en julio 2024 tras una actualización defectuosa de CrowdStrike que colapsó sistemas globalmente.
• Delta demanda a CrowdStrike por más de $500 millones y enfrenta una demanda colectiva de pasajeros afectados.
• La crisis afectó a 1.3 millones de pasajeros y resalta riesgos tecnológicos y legales en la aviación moderna.
En julio de 2024, Delta estuvo envuelta en uno de los mayores problemas tecnológicos en la historia reciente de la aviación. Un fallo en una actualización de software proporcionada por CrowdStrike provocó la cancelación de alrededor de 7,000 vuelos en solo cinco días, afectando a más de 1.3 millones de pasajeros durante el verano, el periodo más ocupado para viajar. Este suceso no solo causó grandes inconvenientes para pasajeros y aerolínea, sino que también desató una importante batalla legal y llevó a analizar hasta qué punto la dependencia tecnológica puede causar problemas reales a las personas que viajan.
¿Qué pasó con Delta y CrowdStrike?

Delta afirma que CrowdStrike, una empresa de ciberseguridad, lanzó una actualización defectuosa de software el 19 de julio de 2024. Aunque Delta dice que no tenía activadas las actualizaciones automáticas, la actualización fue instalada a la fuerza en sus sistemas, sin dar oportunidad de evitarlo. El resultado fue un fallo masivo que no solo dejó a miles de pasajeros varados en aeropuertos, sino que afectó a los sistemas de todo el mundo que usan Windows. Según datos compartidos, más de 8.5 millones de computadoras sufrieron bloqueos similares.
Delta sostiene que si CrowdStrike hubiera probado su actualización al menos en una sola computadora antes de lanzarla, se habrían dado cuenta del problema inmediatamente. En palabras de la propia aerolínea, la falla fue resultado de “recortes, atajos y la omisión del proceso de pruebas y certificaciones que la misma CrowdStrike promociona”, todo con tal de obtener más ganancias. Para Delta, estas acciones constituyeron una “catástrofe global” durante un periodo crítico del año, con consecuencias que van mucho más allá de un simple error técnico.
¿De cuánto es el daño para Delta?
Delta calcula que el daño causado supera los $500 millones de dólares, según la demanda formal presentada en la Corte Superior del Condado de Fulton, Georgia, en octubre de 2024. La compañía busca que CrowdStrike pague por los costos que incluyeron la logística de atender a 1.3 millones de pasajeros afectados, los vuelos alternativos, alojamiento, vehículos, comida y tareas operativas para retomar el servicio poco a poco. La fecha del incidente coincidió con una temporada donde el trabajo de las aerolíneas alcanza su punto máximo, agravando la crisis para todos los implicados.
Este tipo de incidentes no solo afectan a los grandes directivos o las cifras de una empresa; tienen un efecto directo sobre trabajadores, familias, turistas y cualquier persona que dependía de esos vuelos para cumplir compromisos personales o de trabajo.
La respuesta de CrowdStrike ante las acusaciones
CrowdStrike no tardó en negar la responsabilidad sobre lo sucedido y en defenderse públicamente. En declaraciones hechas a la prensa, la empresa aseguró que los reclamos de Delta estaban “basados en información falsa”, y que la postura de Delta demostraba una “falta de conocimiento de cómo funciona hoy la ciberseguridad”. Sostuvieron que Delta solo quería trasladar la culpa por haber tardado tanto en recuperarse, acusando a la aerolínea de no actualizar su tecnología, lo que, en su opinión, explica la lentitud para volver a la normalidad.
Antes del pleito legal, CrowdStrike intentó llegar a un acuerdo fuera de los tribunales, proponiendo una compensación que, según uno de sus abogados, era inferior a $10 millones de dólares. Esta diferencia con el monto reclamado por Delta muestra lo difícil que será llegar a un acuerdo amistoso.
Avances legales: Delta puede seguir con su demanda
Un informe de Reuters del 19 de mayo de 2025 confirmó que la demanda de Delta puede seguir adelante. Esto quiere decir que la corte está de acuerdo en que los reclamos tienen suficiente mérito como para continuar el proceso legal y posiblemente llegar a un juicio. Aunque la resolución final puede tomar tiempo, este avance representa un golpe a la estrategia de defensa de CrowdStrike y un respaldo a la postura de Delta.
Los detalles de la demanda revelan el grado de dependencia de las aerolíneas en herramientas digitales, así como los riesgos de no actuar con la debida precaución en temas de tecnología. El futuro del caso probablemente influirá en cómo otras empresas gestionan la relación con proveedores de servicios digitales, porque los contratos y las responsabilidades quedarán bajo un examen intenso.
El impacto humano: La demanda colectiva contra Delta
Mientras Delta intenta responsabilizar a CrowdStrike, la propia compañía enfrenta una batalla legal distinta pero igual de importante. Una jueza federal en Atlanta dictó recientemente que Delta debe enfrentar una demanda colectiva de los clientes afectados por su actuación durante el fallo causado por CrowdStrike.
Este grupo de pasajeros argumenta que Delta no les devolvió el dinero a tiempo y que tuvieron que gastar grandes sumas en boletos de otras aerolíneas, hoteles, transporte y comidas inesperadas. El juez Mark Cohen decidió que al menos diez pasajeros pueden continuar con su demanda, rechazando así el intento de Delta por reducir la cantidad de casos en su contra. Joseph Sauder, abogado de los demandantes, calificó la decisión como “un paso importante” para que los pasajeros afectados busquen que Delta rinda cuentas.
Esto pone de manifiesto que, en el mundo actual, un fallo tecnológico puede causar no solo pérdidas económicas sino también problemas legales complejos, donde los usuarios finales tienen una vía para exigir compensaciones.
¿Qué revela este caso sobre la aviación moderna y la tecnología?
El caso de Delta y CrowdStrike muestra cómo la operación de las aerolíneas depende cada vez más de la tecnología. Sistemas de reservas, pagos, mantenimiento, seguridad y operaciones de vuelo, todo funciona a través de redes y programas. Una actualización con errores puede detener la actividad de la empresa y, en este caso, paralizar a nivel mundial a vuelos comerciales y de carga.
La caída de 7,000 vuelos cancelados es más que una cifra grande; son miles de destinos perdidos, citas médicas, reuniones de negocios, vacaciones, reencuentros familiares, y todo tipo de compromisos importantes. El suceso deja preguntas importantes:
- ¿Las aerolíneas están preparadas para responder a este tipo de problemas?
- ¿Quién debe pagar cuando un error en el software afecta a millones?
- ¿Deben los proveedores de tecnología asumir responsabilidades más estrictas?
- ¿Están las leyes listas para lidiar con un mundo donde lo digital y lo físico están tan conectados?
El análisis de VisaVerge.com indica que estos temas no solo afectan a las aerolíneas, sino también a empresas de otros sectores que dependen de proveedores tecnológicos. Contratos más claros y pruebas más rigurosas pueden volverse parte de la nueva normalidad al firmar acuerdos con firmas como CrowdStrike.
Cómo afecta esto a los inmigrantes y viajeros internacionales
Las cancelaciones masivas impactan especialmente a quienes tienen más restricciones para moverse, como inmigrantes o visitantes internacionales. Por ejemplo, la interrupción del servicio puede hacer que se pierdan citas de inmigración, entrevistas de visa o plazos legales importantes en consulares o embajadas. Cuando estas situaciones ocurren durante picos de viaje, los reembolsos y reprogramaciones suelen tomar aún más tiempo, dejando a las personas en situaciones vulnerables. Además, quienes dependen de un viaje de regreso para cumplir con requisitos legales pueden verse afectados por la falta de alternativas inmediatas.
Para inmigrantes, perder un vuelo puede suponer la pérdida de una cita migratoria, un permiso temporal o la imposibilidad de llegar a una audiencia legal. En muchos países, si una persona no se presenta en la fecha programada para algún trámite, puede perder la oportunidad de regularizar su estancia o de evitar la deportación.
En casos de familias separadas, la imposibilidad de viajar puede impedir que padres se reúnan con sus hijos o que trabajadores lleguen a tiempo para cumplir contratos. Estas situaciones subrayan la importancia de procesos claros de compensación, asistencia y comunicación por parte de las aerolíneas, sobre todo cuando los errores tecnológicos están fuera del control de los pasajeros.
Consejos prácticos para los pasajeros afectados y enlaces útiles
Si eres uno de los pasajeros que sufrió cancelaciones durante el fallo de Delta y CrowdStrike, hay pasos concretos que puedes seguir:
- Conserva todas las facturas de gastos adicionales, como hoteles, transportes y comidas.
- Busca información oficial de la aerolínea sobre cómo solicitar reembolsos o compensación.
- Si eres inmigrante y perdiste una cita por culpa del incidente, comunícate con la oficina de inmigración correspondiente para explicar la situación.
- Considera unirte a iniciativas legales, como la demanda colectiva, si cumples con los requisitos.
Los organismos gubernamentales, como el Departamento de Transporte de Estados Unidos, mantienen guías claras sobre los derechos de los pasajeros ante cancelaciones y retrasos de vuelos. Para obtener detalles y soluciones oficiales a tus reclamos, puedes visitar su página sobre derechos de los pasajeros aéreos.
Implicaciones a largo plazo para el sector aéreo y los proveedores tecnológicos
El ejemplo de la demanda de Delta contra CrowdStrike puede influir en cómo las empresas negocian con proveedores de tecnología. Es probable que, en adelante, se exijan garantías más detalladas y procesos de prueba antes de instalar actualizaciones críticas. También se puede esperar que los seguros relacionados con interrupciones tecnológicas sean más comunes y que aparezcan protocolos de emergencia estrictos para evitar otra serie de 7,000 vuelos cancelados.
Para los proveedores, este caso muestra que los errores no solo afectan su reputación, sino que pueden terminar con demandas millonarias. La comunicación clara, la transparencia y la honestidad sobre los riesgos de cada cambio tecnológico se volverán esenciales en la relación con clientes grandes como las aerolíneas.
Además, el resultado de estos juicios podría determinar nuevos estándares legales sobre responsabilidad en el campo de la tecnología, lo que influirá en futuras alianzas entre proveedores y empresas.
Diferentes puntos de vista y debate público
No todo el mundo está de acuerdo en cómo se debe repartir la culpa. Mientras que Delta insiste en que la única causa fue la actualización fallida de CrowdStrike, la empresa de ciberseguridad afirma que la aerolínea pudo haber recuperado el servicio más rápido si hubiera invertido antes en su infraestructura. En redes sociales y foros especializados, algunos defienden la postura de Delta, enfatizando el deber de la empresa proveedora de probar cada actualización. Otros creen que las compañías grandes también deben mantener sus sistemas ágiles y modernos para no depender íntegramente de terceros.
El debate sobre la responsabilidad compartida está lejos de terminar, y el caso se sigue estudiando en medios, despachos legales y foros sobre tecnología y aviación.
Conclusión: lo que todos pueden aprender del caso Delta–CrowdStrike
El conflicto legal entre Delta y CrowdStrike por el fallo que resultó en aproximadamente 7,000 vuelos cancelados deja en claro la importancia de la tecnología bien gestionada en sectores tan esenciales como la aviación. Tanto compañías grandes como proveedores deben poner la seguridad y la calidad por encima de la rapidez y la ganancia. Los viajeros, en tanto, necesitan conocer sus derechos y reclamar asistencia cuando un problema técnico afecta sus vidas.
Si bien el caso sigue en desarrollo, ofrece ejemplos claros de qué se debe y qué no se debe hacer en el futuro. Para estar informado sobre pasos legales y derechos de pasajeros, es recomendable consultar fuentes oficiales de transporte y seguir portales de información reconocidos como VisaVerge.com. Ante la duda, guardar toda la documentación y buscar ayuda temprana puede marcar la diferencia entre una rápida solución y un problema mayor.
Aprende Hoy
Demanda colectiva → Procedimiento legal donde varios afectados se agrupan para reclamar daños a una empresa responsable de un mismo hecho.
Actualización de software → Nueva versión de un programa que busca mejorar funciones o corregir errores, pero a veces genera fallos mayores.
Ciberseguridad → Conjunto de técnicas y medidas para proteger sistemas y datos frente a ataques o accesos no autorizados.
Infraestructura tecnológica → Red de equipos, software y sistemas que permite el funcionamiento tecnológico de una empresa.
Indemnización → Pago económico buscado o concedido por daños o perjuicios derivados de acciones de otra parte.
Este Artículo en Resumen
Un error de CrowdStrike paralizó a Delta en julio 2024, cancelando 7,000 vuelos y afectando a más de 1.3 millones de pasajeros. Las demandas multimillonarias demuestran cómo la tecnología puede desencadenar crisis inmensas en la aviación y remarcan la necesidad de controles más estrictos y rápidas compensaciones para los usuarios afectados.
— Por VisaVerge.com