Puntos Clave
- El Reino Unido permitió dependientes para becarios gazatíes con becas completas el 29 de octubre de 2025.
- Solo parejas/cónyuges y hijos menores de 18 son elegibles; requieren demostrar £6,120 fuera de Londres o £7,605 en Londres.
- La medida cubre cursos que empiecen hasta el 31 de diciembre de 2025; FCDO intentará facilitar salidas, sin garantías.
(UNITED KINGDOM) El gobierno británico anunció el 29 de octubre de 2025 un cambio decisivo en su política de inmigración para estudiantes palestinos de Gaza: quienes cuenten con becas completamente financiadas podrán traer a sus parejas y a sus hijos menores de 18 años a vivir temporalmente en el Reino Unido, una inversión destinada a garantizar que los becarios puedan continuar sus estudios sin verse separados de sus familias. La medida, que revierte la prohibición anterior de incorporar dependientes, llega tras una campaña sostenida de académicos y grupos humanitarios; y forma parte de una estrategia de ayuda ampliada a Gaza en medio del conflicto que continúa sacudiendo la región. El anuncio fue hecho por la Secretaria de Exteriores, Yvette Cooper, y se inscribe en el marco de los esfuerzos británicos para sostener la educación y la investigación en Gaza y en la diáspora palestina, al tiempo que se aborda la necesidad de reunificación familiar que muchos han descrito como crucial ante la crisis humanitaria.
La nueva regla se aplica a estudiantes gazatíes que estén ganando becas totalmente financiadas y verificables para cursos que comiencen como máximo el 31 de diciembre de 2025. Entre las condiciones, solo podrán optar a la figura de dependientes las parejas o cónyuges y los hijos menores de 18 años, tal como se define en las Reglas de Inmigración del Reino Unido. En cuanto a los costos, los dependientes deben demostrar fondos para cubrir sus gastos de vida: £6,120 para estudios fuera de Londres o £7,605 para estudios en la capital. Las solicitudes de visa se gestionan caso por caso, y tanto el estudiante como sus dependientes deben presentar sus solicitudes y pagar las tasas correspondientes. El proceso, según las autoridades, mantiene flexibilidad pero exige la presentación de pruebas de capacidad económica y de la verificación de la beca que financia los estudios.
El Gobierno británico ha reiterado que la salida de Gaza para los beneficiarios y sus familias depende de la coordinación con socios internacionales y, en última instancia, de circunstancias que están fuera del control de las autoridades británicas. La Foreign, Commonwealth and Development Office (FCDO) se compromete a facilitar la salida de los elegibles, pero admite que no puede garantizar timelines fijos dadas las condiciones volátiles de la frontera y la situación humanitaria en curso. Esa dificultad real no resta, sin embargo, al impulso político de permitir a estudiantes palestinos retomar o iniciar sus estudios en entornos universitarios británicos, donde muchos esperan continuar sus carreras académicas en condiciones de mayor seguridad.
Una portavoz del gobierno afirmó:
“Estudiantes que llegan desde Gaza a Reino Unido han sufrido un trágico calvario tras dos años de conflicto”
subrayando la importancia de la educación para la reconstrucción. La declaración, que acompaña a la nueva política, retoma la idea de que la formación académica y la movilidad educativa pueden aportar un giro decisivo ante una crisis que ha dejado a muchas familias en situaciones precarias y que ha roto rutas de acceso a la educación superior para numerosos jóvenes de Gaza. Este énfasis en la educación como motor de resiliencia llega en un momento en que la región ha visto un incremento en medidas humanitarias británicas, incluida una asignación de £101 millones para ayuda en 2025/26 al Este de Jerusalén y a Gaza, con £34 millones destinados a UNRWA, y en que el Reino Unido formalizó el reconocimiento del Estado de Palestina en septiembre de 2025, junto con la actualización de su lista de nacionales que exige visa para entrar al país a partir del 11 de noviembre de 2025.
Entre las voces que dieron forma a este cambio está la labor de la Dra. Nora Parr, investigadora de Birmingham que coordina apoyos para las familias de los estudiantes. Parr afirmó sentirse “devastada” por los que perdieron “lugares obtenidos con tanto esfuerzo” por perder fechas límite o enfrentarse a obstáculos logísticos que impidieron su llegada o la de sus dependientes. Sus palabras reflejan la dimensión humana de una política que, para muchos, ha sido una carrera contrarreloj frente a trabas administrativas y a un entorno cambiante en Gaza y en los pasos de salida.
El caso de Manar al-Houbi, candidata a un doctorado, ilustra el peso personal de la medida. Al-Houbi, que está a punto de completar su PhD, describió el periodo anterior como una situación en la que era “imposible” dejar atrás a sus tres hijos y a su marido. En el marco de la nueva regla, Al-Houbi dijo que espera evacuar “muy pronto” hacia el Reino Unido para continuar su investigación sin perder su lugar en el programa académico que ha logrado. Sus declaraciones, compartidas por las partes que trabajan para agilizar reubicaciones, subrayan el cambio práctico que podría permitir a varias familias palestinas recomponer su vida en ciudades como Birmingham o Glasgow, donde algunas jóvenes promesas de la ciencia y la ingeniería ya preparan su próximo capítulo académico.
De hecho, hasta la fecha y desde que comenzó la operación de evacuación en septiembre de 2025, al menos 75 estudiantes gazatíes han llegado al Reino Unido, según fuentes oficiales citadas en el contexto del anuncio. De ellos, 17 llegaron el 28 de octubre de 2025, un índice que subraya el alcance operativo de la respuesta británica ante la crisis. No obstante, la situación no es uniforme: seis candidatos a master en Glasgow se encuentran en una situación de incertidumbre por haber perdido fechas límite para sus trámites, una realidad que el gobierno inglés aborda con la promesa de procesos más rápidos para becarios como los gestionados por programas Chevening y otros apoyos similares.
En la arena de las declaraciones oficiales, la Secretaria de Exteriores, Yvette Cooper, afirmó:
“The conflict in Gaza has had an appalling impact on education… students in Gaza have shown incredible resilience and unwavering determination to pursue their studies against an appalling backdrop of death, destruction and famine.”
Este testimonio sirve para situar la prioridad humanitaria de la medida y enfatizar la necesidad de sostener a las comunidades estudiantiles afectadas por un conflicto que ha devastado infraestructuras y afectado la vida cotidiana de miles de familias de Gaza.
La Secretaria de Educación, Bridget Philipson, se sumó a la valoración positiva de la medida, señalando:
“These students have lived through an appalling ordeal, with many losing loved ones and having their studies torn apart by the devastating impact of war. I am relieved that we have been able to help them reach the UK and take up their places at our universities, where they can continue their education in safety.”
Sus palabras recalan en la dimensión educativa de la respuesta y en el objetivo de dar un marco seguro a estudiantes vulnerables para que continúen sus programas académicos sin interrupciones causadas por la guerra o por la separación familiar.
Este conjunto de acciones se inscribe en un contexto más amplio: la política migratoria británica hacia Palestina se ha ajustado para reflejar realidades cambiantes. En septiembre de 2025, el Reino Unido formalizó el reconocimiento del Estado de Palestina, y a partir del 11 de noviembre de 2025, se exige a todos los nacionales palestinos obtener visa para ingresar al Reino Unido. Estas decisiones se enmarcan en una combinación de consideraciones humanitarias, diplomáticas y de seguridad que han dominado el debate parlamentario y público en los últimos años. Los cambios también han estado acompañados de un fuerte escrutinio público y de presión de distintos sectores, incluidos parlamentarios y grupos que trabajan con estudiantes y comunidades palestinas, que han insistido en la necesidad de permitir la reunificación familiar como un componente central de la respuesta a la crisis humanitaria en Gaza.
El nuevo régimen para dependientes se adopta en un momento en que el Reino Unido ya ha participado en una respuesta de emergencia para Gaza que ha priorizado la continuidad educativa de los estudiantes palestinos. Para algunos, la apertura de puertas a la reunificación familiar aparece como un paso humano, pero para otros persiste la preocupación sobre cuánto tiempo y cuán efectivamente se podrán gestionar las condiciones de salida de Gaza, dada la complejidad de las operaciones logísticas, la seguridad en la región y las restricciones de frontera. En ese sentido, el gobierno ha destacado que la salida de Gaza para dependientes y estudiantes está sujeta a coordinación con otros actores internacionales; y que, en algunos casos, la logística de evacuación podría demorar más de lo deseado. No obstante, la promesa de que las familias puedan reunirse representa una señal de esperanza para aquellos que han visto fragmentarse su vida entre becas y desalojos.
La política se ancla en un marco práctico: los solicitantes deben demostrar fondos para cubrir gastos de vida, y la evaluación de cada caso debe considerar las realidades de cada familia. En virtud de la regla, las parejas y los hijos pueden presentar solicitudes de visa para unirse a los estudiantes que cuentan con becas completas en cursos que se inician antes del final de 2025, mientras que el gobierno observa de cerca la situación en Gaza y mantiene la posibilidad de ajustar los procedimientos a medida que evoluciona la seguridad y la necesidad humanitaria. En términos de implementación, la coordinación entre agencias —incluida la FCDO, el Home Office y otras dependencias pertinentes— será clave para garantizar que las familias reciban orientación y apoyo para completar los trámites y para encontrar rutas de salida que, en la medida de lo posible, sean rápidas y seguras.
Para quien se pregunta por la viabilidad de la medida para dependientes, la experiencia de los últimos meses ya ofrece indicios de la magnitud de la ayuda que puede aportar esta política. El número de beneficiarios directos se incrementó a partir de septiembre de 2025, cuando la primera oleada de alumnos llegó al país, y el gobierno ha señalado su compromiso de facilitar, dentro de las limitaciones existentes, rutas para que las familias se reubiquen y cuenten con un entorno que les permita continuar sus estudios y construir un futuro académico en un entorno más estable. Aun así, persiste cierta incertidumbre: la implementación de estas medidas depende de la situación en Gaza, de los apoyos internacionales disponibles y de la capacidad de las instituciones británicas para gestionar procesos de visa y de reubicación de forma expedita, especialmente para estudiantes que llegan con dependientes.
El caso de las personas que ya han llegado y de las que esperan hacerlo en los próximos meses se ve reflejado en parte por las cifras de llegada: 75 Gazan students have arrived en total, con 17 de ellos el 28 de octubre de 2025. Estas cifras muestran un flujo que la nueva política de dependientes espera amplificar, especialmente para aquellos que han visto cómo sus planes académicos eran interrumpidos por la imposibilidad de viajar con sus familias. Es aquí donde la experiencia de academias como Chevening —un programa que financia becas para estudios de posgrado en el Reino Unido— y otros esquemas de financiación estudiantil adquiere una nueva dimensión, al permitir que estudiantes con becas robustas accedan no solo a formación de calidad, sino también a un marco que reconoce la necesidad de apoyo familiar para completar el proceso académico. Para quienes buscan entender la dinámica de estos programas, Chevening ofrece una vía de movilidad que, a la luz de esta revolución en las políticas de dependientes, podría verse fortalecida por un esquema más humano y práctico para las familias que acompañan a los estudiantes.
En ese sentido, la combinación de apoyo institucional, reconocimiento diplomático y una voluntad explícita de reducir las barreras para las familias de Gaza marca un punto de inflexión en la política de inmigración británica hacia Palestina. Sin duda, la medida llega con un reconocimiento inequívoco de que la educación es una línea de vida para los estudiantes palestinos, muchos de los cuales han visto cómo su progreso educativo quedaba suspendido o expuesto a riesgos de seguridad y de salud ante un conflicto que continúa gravitando sobre Gaza y las zonas vecinas. En el trasfondo, hay una cuestión de justicia educativa: los estudiantes palestinos que han obtenido becas y han sido aceptados en universidades del Reino Unido merecen, en la medida de lo posible, un entorno que les permita continuar sus estudios sin la carga adicional de tener que elegir entre sus carreras académicas y la seguridad de su familia.
Aun así, los responsables oficiales reconocen que la implementación de esta política depende de circunstancias que no siempre están bajo control. Las condiciones en Gaza, los esfuerzos de evacuación coordinados con aliados internacionales y la dinámica de las fronteras impiden garantizar un calendario definitivo. Por ello, el gobierno británico ha enfatizado que la salida de Gaza para dependientes y para los propios estudiantes se gestionará de forma gradual y sensible a las realidades sobre el terreno. Recordando la dimensión humana de la crisis, los mensajes oficiales reflejan una voluntad de no dejar a nadie atrás, aun cuando existan obstáculos logísticos que exigen paciencia y cooperación internacional sostenida.
Para los próximos meses, la atención estará en cómo se implementa la regla de dependientes y en si se logran mitigar las demoras que han afectado a seis estudiantes de maestría en Glasgow, que se quedaron sin fecha límite clara y permanecen en un limbo administrativo. También habrá que observar la capacidad del FCDO y de las embajadas y consulados británicos para facilitar la salida de Gaza y la reunificación de familias, especialmente en un contexto internacional que exige coordinación entre múltiples actores.
En resumen, la decisión de permitir que estudiantes palestinos de Gaza en becas completas traigan a sus dependientes representa una respuesta humanitaria directa a una petición que ha sido reiterada por académicos y grupos de ayuda. Es un reconocimiento de la importancia de la educación para la reconstrucción y la estabilidad a largo plazo, así como de la necesidad de asegurar que quienes llegan a estudiar en el Reino Unido no deban enfrentar la separación familiar como un obstáculo adicional. Aunque las fechas exactas de evacuación y la forma de gestionar cada caso siguen dependiendo de una serie de variables que cambian con rapidez, el compromiso explícito de las autoridades británicas, incluido el propio Foreign Secretary y el Education Secretary, ofrece una base para que los estudiantes palestinos, sus parejas y sus hijos puedan mirar hacia una experiencia educativa en el Reino Unido con mayor claridad y, con suerte, con menos miedo a perder lo que más valoran: sus familias y su futuro académico. Los próximos meses serán críticos para evaluar hasta qué punto la esperanza se transforma en realidades tangibles, y para entender si, finalmente, la educación puede ser un puente en una región marcada por la violencia y la inestabilidad.
Para aquellos que deseen seguir informándose sobre la política de visados y la movilidad de estudiantes en el Reino Unido, el portal oficial de visas e inmigración del Gobierno británico ofrece guías actualizadas sobre requisitos, procesos y plazos: visas e inmigración. Para información sobre becas y oportunidades de estudio financiadas, el programa Chevening también ofrece recursos y directrices para quienes buscan avanzar en sus estudios en el Reino Unido: Chevening Scholarship. Este entramado de políticas y programas no solo define un nuevo paisaje para estudiantes palestinos, sino que también señala un compromiso institucional a largo plazo con la educación y la reunificación familiar en medio de una crisis humanitaria que continúa evolucionando.
Aprende Hoy
Dependientes → Parejas o cónyuges y los hijos menores de 18 que pueden acompañar a un titular de visa de estudiante en el Reino Unido.
FCDO → Foreign, Commonwealth and Development Office: departamento británico responsable de diplomacia y asistencia internacional.
Chevening → Programa de becas financiado por el Reino Unido para estudios de posgrado, ejemplo de financiación verificable.
Este Artículo en Resumen
El Reino Unido anunció el 29 de octubre de 2025 que dependientes podrán acompañar a estudiantes de Gaza con becas completas para cursos hasta el 31 de diciembre de 2025. Las parejas y los hijos menores de 18 deben demostrar fondos de mantenimiento (£6,120 fuera de Londres, £7,605 en Londres) y presentar visas separadas. La FCDO intentará ayudar salidas desde Gaza, aunque las fronteras volátiles impiden garantías. Al menos 75 estudiantes gazatíes han llegado al país desde septiembre de 2025.
— Por VisaVerge.com
